Los minichefs tocan el cielo en el quinto concurso infantil de cocina

El concurso minichef ya es una realidad, una actividad que ha sorprendido a todos por la destreza y calidad de los ocho concursantes. Este viernes tenía lugar en el Tramo Almería 2019 la quinta edición del Concurso Minichef, continuación de las bodas de plata del concurso gastronómico.

Todos los participantes pasaron a la gran final y este viernes se encargaron de diseñar sus platos estrella. A diferencia de la primera fase, en donde solo tuvieron que emplatar, los concursantes tuvieron que cocinar desde el Paseo de Almería. Los pequeños, con edades comprendidas entre los 8 y 12 años, dispusieron de cerca de una hora y media para la consecución de su obra.

Paula, Raquel, Antonio, Pedro, Manuel, Julio, Carmen y María probaban sus habilidades bajo la atención de los cocineros y los jurados. Uno de los concursantes no tuvo suerte y su bol con verduras picadas cayó al suelo. Sin embargo, no se rindió y siguió luchando como un gladiador de la cocina. Los nervios iniciales se compensaron con una pericia impropia para los niños de su edad.

El certamen contó con un invitado de honor. Javier Llamas, exconcursante de Master Chef Junior 4, explicó su experiencia en el 'talent show' y animó a los cocineros en todo momento. Junto a él, el jurado ha estado compuesto por Mariluz Ruiz, chef del colegio Saladares, Beatriz Llanos, una de las responsables de Sakata, y Mariela Bocchio, perteneciente a Tu Chef Talleres y una de las organizadoras del evento. 

El veredicto

Los concursantes entregaron uno a uno su composición a un jurado encantado y maravillado ante las presentaciones. Los primeros contaron lo que hicieron en su plato y mencionaron los ingredientes empleados.

El bacalao con pisto, el falso cuscús, la cola de langostinos o el quiche de verduras fueron algunos de los platos que el tribunal degustó. Carlos Sánchez, concejal de Promoción y Ana Martínez Labella, concejala de Urbanismo, también participaron en la degustación. El mensaje de estos ha sido claro: las comidas de los pequeños eran mejores que las del certamen de adultos.

Los expertos seleccionaron los tres mejores pero nadie perdió. Todos han aprendido de sus compañeros y recordarán la experiencia. Antonio, con su marraná de pulpo; Paula, con su bacalao con pisto, y María, con su pipirrana en barquitos, fueron sido los platos ganadores. En definitiva, un concurso para chuparse los dedos.