“Se habla de Doñana y ahora ponemos un festival en la puerta de Cabo de Gata”

Primera movilización de los vecinos de El Toyo coincidiendo con la Romería a Torregarcía

Movilización de vecinos de El Toyo.
Movilización de vecinos de El Toyo.
Álvaro Hernández
23:11 • 14 ene. 2024

Los vecinos de El Toyo aseguran seguir viviendo "estupefactos". El anuncio, por sorpresa, de la celebración el próximo mes de agosto del Dreambeach en los terrenos propiedad de la Unión Deportiva Almería generó a mediados de diciembre inquietud e incertidumbre y, a día de hoy, los residentes de la zona reclaman respuestas, una reunión con la alcaldesa y, como objetivo final, la no celebración del festival en esta zona.



Para reclamar estas cuestiones, un grupo de una treintena de vecinos se manifestaba en un lugar especialmente transitado en la mañana de este domingo: el final del Paseo Marítimo de Retamar, justo en el punto de acceso de más de un millar de personas a la playa de Torregarcía en el día de la Romería de la Virgen del Mar.



En esta concentración, los vecinos han informado de la situación a otros almerienses de la zona y, además, han recogido firmas. "Hemos duplicado las que teníamos ya; teníamos unas 300 y nos hemos sorprendido, porque pensábamos que muchos vecinos eran reacios y al contrario", explica Jesús María Rama, vecino de El Toyo desde hace siete años. "Llevamos más de 500 firmas ahora mismo y las queremos entregar en el registro del Ayuntamiento antes de que acabe enero para que le lleguen a la alcaldesa", señala, subrayando además que "lo bueno de todas esas firmas y lo que nos apoya especialmente es que son firmas de gente con dirección, residentes de El Toyo, afectados directos". 



Dudas



Desde la movilización señalan que, un mes después de enterarse por las redes sociales de la celebración del Dreambeach en El Toyo, aún no han conseguido dos cosas importantes para ellos: que alguien resuelva sus dudas respecto al festival y poder tener una fecha concreta para reunirse con la alcaldesa de Almería, María del Mar Vázquez.



"El 18 de diciembre tuvimos la reunión ordinaria de la Entidad de Conservación de El Toyo y apareció por sorpresa Diego Cruz, concejal de Cultura", recuerda Rama. "No nos respondió a ninguna pregunta que ya le hicimos allí; así que fuimos al pleno el viernes 12 de enero, casi un mes después, y seguimos sin respuesta... Es una locura", se queja este vecino.



Así, los vecinos también señalan que "a día de hoy seguimos sin tener ninguna Reunión ni ninguna cita con la alcaldesa ni absolutamente nada. No tenemos nada". De hecho, ponen su propia teoría sobre la mesa: "Parece que van a alargar los plazos... Tenemos la sensación de que van a alargar los procesos para que administrativamente no podamos detener esto; estamos empezando a percibir que quieren parar a los vecinos en lugar de escucharnos y atendernos en nuestras súplicas, que creo que son lógicas y son lícitas", denuncian, eso sí, con un objetivo claro: "No vamos a parar hasta que esto se detenga". 



Inquietud medioambiental

Los vecinos afirman estar ya trabajando con grupos ecologistas y biólogos para realizar estudios sobre el impacto medioambiental de la celebración del Dreambeach en este paraje. "Vivimos a las puertas del Parque Natural Cabo de Gata. Si vivimos 15.000 personas (aunque aparezcan censadas 9.000), no sabemos en tres o cuatro días el daño ecológico y medioambiental que puede hacer eso... Escuchamos todos los días noticias sobre Doñana y ahora vamos y ponemos un macrofestival en la puerta de Cabo de Gata", se sorprende Jesús María Rama.


"Vivimos asombrados", explica este vecino que además se sorprende porque "nos hemos encontrado a mucha gente que desconocía que el Dreambeach va al lado de Villa Mediterráneo, es sorprendente. Pero es que el Ayuntamiento no nos ha dado información ninguna", reitera.


Así las cosas, señalan que la celebración del festival tendría lugar a 50 metros de las viviendas más cercanas, "y hoy en día no existe estudio medioambiental alguno, ni nos han enseñado el convenio que supuestamente han firmado con la promotora, que está vendiendo entradas de un festival que no sabemos si se va a celebrar... Porque es puerta de entrada al Parque Natural y no sé hasta qué punto es legal", explica.


"A día de hoy los vecinos vivimos estupefactos", sentencia. 


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