La Voz de Almeria

La Foodineta

El conocido pueblo costero de Almería donde se come muy bien: sabor auténtico con vistas al mar

Famosos de toda España han elegido en varias ocasiones este municipio para comer por la infinidad de opciones que tiene

Imagen de archivo del Restaurante Neptuno, en Mojácar.

Imagen de archivo del Restaurante Neptuno, en Mojácar.La Voz

Jaime Molero
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Almería esconde auténticas joyas gastronómicas entre sus pueblos. La cultura del buen comer no se aprende y, entre los almerienses, es algo que viene en el ADN. Desde arroces hasta pescados frescos y de calidad, no hay prácticamente ningún plato que no se pueda encontrar bien hecho en Almería. Y eso, es precisamente lo que sucede en Mojácar.

Conocido por el índice de turismo que concentra cada verano y su amplia y diversa oferta gastronómica y de ocio, Mojácar es un auténtico tesoro para Almería. Lo es, especialmente, en aquellos meses en los que se vacía de turismo y los almerienses pueden disfrutar de su gastronomía y de las ventajas que ofrece.

Además de su privilegiada ubicación, lo que hace especial a Mojácar es que no existe comida que no puedas degustar en alguno de sus restaurantes. Los hay de arroces, de pescados, orientales, asadores... y así, un largo etcétera. 

Un arroz del Restaurante Neptuno.

Un arroz del Restaurante Neptuno.La Voz

Lo mejor de Mojácar

Recopilar los mejores restaurantes de este municipio almeriense es prácticamente imposible, pero sí algunos que destacan por su variada oferta gastronómica y la calidad de sus productos. Sin duda, uno de ellos es el clásico Restaurante Neptuno, un restaurante que combina especialidades como arroces, espetos o pescados a la brasa y que apuesta por el producto local. 

El Chiringuito Aku Aku es otro de los grandes protagonistas de la hostelería mojaquera. En él, se unen la buena cocina mediterránea y la mejor música, especialmente en los meses de verano, donde acompañan sus sabrosos platos con conciertos de jazz, flamenco y otros géneros.

En Mojácar, cada uno puede personalizar la experiencia que desee, y encontrar restaurantes que se ajusten a lo que cada uno busca. El Restaurante Arcilla, en Macenas, es otro de lugares idóneos para disfrutar de la cocina mediterránea más exclusiva. Dispone de una amplia carta de arroces, carnes a la brasa y creaciones originales y más distintivas, como los raviolis de jabalí con grué de cacao.

Comer en Aku Aku, toda un experiencia.

Comer en Aku Aku, toda un experiencia.LA VOZ

Los favoritos de los comensales

Dentro de las webs especializadas en reseñas y comentarios sobre restaurantes y bares, los comensales tienen claros cuáles son sus favoritos. El primero, con una puntuación de 4,7 sobre 5, es el Torre Bahía. Un hermoso restaurante lounge a solo 50 metros del bullicio de Mojácar Playa que ofrece de todo.

Los restaurantes La Parata o Cabo Norte también figuran como los favoritos por los almerienses y visitantes. Lo son por su cocina sencilla, pero elaborada y por el excelente ambiente que envuelve a ambos lugares.

Restaurante Torre Bahía. Tripadvisor.

Restaurante Torre Bahía. Tripadvisor.La Voz

Y, para aquellos que prefieren una experiencia gastronómica más internacional, también están recomendados La Estancia (platos argentinos), Calima (fusión mediterránea y árabe), Scotty's (fish and chips) o Doro, que combina la cocina japonesa y el alma mediterránea. 

Mojácar lo tiene todo, y eso lo sabe todo aquel que la visita alguna vez. Entre ellos, algunas de las caras conocidas que cada verano elige el municipio almeriense como su destino ideal para sus vacaciones. Sin ir más lejos, este mismo verano los pilotos y hermanos Márquez –que visitan frecuentemente Mojácar–, acudieron al Chiringuito Maui Beach –otro de los imprescindibles– para disfrutar de una cena con amigos. 

Cena de los hermanos Márquez en Mojácar.

Cena de los hermanos Márquez en Mojácar.La Voz

En definitiva, Mojácar no solo es uno de los lugares más visitados de la provincia, sino también uno de los más sabrosos. Entre el murmullo del mar y el blanco de sus calles encaladas, este rincón almeriense conserva la esencia de una cocina que mira al pasado sin renunciar a la modernidad. Ya sea frente a la orilla o en el corazón del pueblo, cada plato es una invitación a saborear Almería en su máxima expresión.

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