Llega el verano y 'los calores' apetece cambiar el rico cuchareteo almeriense (idóneo para el invierno) por algo más fresquito, más veraniego y por supuesto con con el sabor de los productos que ofrece la tierra y el mar de Almería. Teniendo en cuenta que nuestra provincia tiene una riquísima gastronomía, no solo por la calidad de sus platos, sino por la variedad de los mismos, en La Voz de Almería hemos querido recopilar algunas de las recetas más típicas del verano pese a que algunas se consuman durante todo el año. ¿Cuál es vuestra favorita?

1. Torticas de avío de Vera

Las Torticas de Avío es una receta tradicional Vera en el Levante almeriense. Combinan lo mejor de la tierra y el mar en una en una elaboración sencilla a la par que sabrosa. 

Ingredientes: Para hacer 8 de estas Torticas se necesitan 3 pimientos verdes, 2 tomates rojos, 1 cebolla, 4 dientes de ajo, 350 gramos de boquerones pequeños, orégano, cominos molidos, azafrán, aceite de oliva virgen extra, 600 gramos de harina de maíz, agua templada y 1 cucharada de sal. 

Elaboración: Primero se deben limpiar los boquerones, quitándoles la cabeza, la tripa y las espinas. Luego, hay que picar la cebolla, los pimientos, los tomates y filetear los ajos y ponerlo todo en un mismo recipiente. A continuación, añadir los boquerones. 

Sobre la mezcla, añadir el orégano, el comino molido, unas hebras de azafrán, sal y un chorreón de aceite de oliva. Mezclamos todo bien y dejamos reposar. 

Para hacer la masa, ponemos harina de maíz en un cuenco, hacemos un hueco en el centro y añadimos la sal. Añadimos dos vasos de agua templada poco a poco. Mezclamos todo y sobre papel de horno ponemos una porción de masa y la aplanamos para que alcance los 10 cm de diámetro. Hacemos un borde con los dedos. Dentro ponemos el avío (boquerones con el picadillo). 

Para finalizar, metemos las Torticas en el horno precalentado a 170º unos 25 minutos, hasta que se doren. 

Se pueden tomar en caliente o en frío. 

2. Gazpachuelo de Almería

Almería, hogar del pepino. El Gazpachuelo de Almería es una de las recetas más simples y refrescantes de la provincia, y es que es ese su principal objetivo. Su modo de preparación escandalosamente fácil es idóneo para aquellos a los que el calor les activa el 'modo vago' y perfecto para aquellos que disfrutan de los platos fríos. 

Ingredientes: Para preparar este Gazpachuelo se necesitan 4 pepinos, 1/4 de sandía, aceite de oliva, sal, lima y de 4 a 5 cubitos de hielo. 

Elaboración: Primero, se deben pelar los pepinos y se cortan en daditos. Los ponemos en un bol con agua, que cubra y hielo. La idea es enfriar al máximo el ingrediente primordial para que sea un plato refrescante. Se le añade un correón de aceite de oliva, un poco de sal y zumo de lima. Lo dejamos en la nevera durante 45 min mientras cortamos la sandía en taquitos, y los añadimos al bol. 

Cabe destacar que la receta original no lleva ni sandía ni lima, de hecho, esta última se sustituye por vinagre de Jerez, aunque esta es una buena forma de hacer algo diferente sin perder la esencia. 

Servir muy frío.

3. Fritá de verduras

¿Qué sería de Almería sin sus verduras? Hay miles de formas de preparar lo mejor que da la tierra almeriense, sus hortalizas. Y una de ellas es la frita o fritada, tanto que se ha hecho famosa por la marca Suflí, la cual la prepara con sumo cariño y calidad. Aunque ya se puede comprar preparada, si a alguien le pica la curiosidad y la quiere preparar por sí solo, también puede.

Ingredientes: 3 tomates maduros, 1 calabacín, 1 berenjena, 4 pimientos italianos y 2 cebollas. 

Elaboración: Primero se deben cortar y lavar bien todas las verduras. Luego, se pone todo en una sartén con aceite de oliva, un poco de sal y pimienta, y los tomates rallados sin piel. 

Rehogamos todas las verduras y cuando todo el agua se consuma, añadimos 4 cucharadas soperas de tomate frito. 

Además de ser un plato completo, también es un complemento perfecto, que se puede añadir a platos de carne, arroz o atún, y además, se puede consumir tanto en frío como en caliente. 

4. Calamar en aceite en olla lenta

Pese a que sea una receta que se pueda consumir durante todo el año, por supuesto, lo que ofrece el mar apetece más en verano, como es el caso de este calamar. Aunque tradicionalmente se realiza en sartén o en una cazuela, también se pueden aprovechar las ventajas de la olla lenta y conseguir un acabado un poco distinto. 

Ingredientes: Para preparar cinco raciones, se necesitan 6 calamares grandes ya limpios, sal al gusto, 30 gramos de pimienta en grano, 15 hojas de laurel, aceite de oliva hasta cubrir, 1 cabeza de ajo. 

Elaboración: Primero se parten los ajos por la mitad, se salan ligeramente los calamares. Luego se introducen en la olla lenta los calamares intercalando los ajos, la pimienta en grano y el laurel. Todo debe cubrirse con aceite. 

Programar la olla para dos horas y media en temperatura alta. El objetivo es que el calamar quede blando. Cuando quede así, hay que sacar un poco de aceite de la olla y ponerlo sobre una sartén, en un fuego alto. En este caso la intención es 'tostar' un poco el calamar. 

Así, ya estaría listo para emplatar y disfrutar de su sabor.

5. Ajoblanco de Almería

Este es uno de los platos almerienses por excelencia. Se puede consumir tanto en invierno como en verano, da igual, siempre apetece. Aunque eso sí, en verano juega con ventaja al servirse frío. Es el picoteo perfecto para abrir boca antes de cualquier comida. 

Ingredientes: Para preparar este plato exquisito se necesitan 100g de almendra pelada, 40g de pan sentado, 1 diente de ajo, 0'1 litros de aceite de oliva, 2 vasos de agua, sal y vinagre. 

Elaboración: Para realizar este plato se pone en remojo el pan con agua y un chorrito de vinagre. Si las almendras tienen piel, se escaldan en agua hirviendo y se pelan. Se pela el ajo. Se pone en la batidora el pan remojado, las almendras, el ajo, el aceita, el agua y un pellizco se sal. Se tritura todo bien hasta que quede una especie de salsa, similar a la mahonesa.