España está siendo golpeada por la borrasca Kirk y la provincia de Almería también nota los efectos del temporal de viento y fenómenos costeros. De hecho, a primera hora de la tarde varios puntos de la capital habían registrado rachas de viento superiores a los 60 km/h, alcanzando incluso los 81 km/h en el aeropuerto según los datos ofrecidos por la red Ametse. Se hacía muy complicado caminar cerca de las playas de la capital, que habitualmente suelen estar concurridas de personas que se acercan a tomar el sol o a dar un paseo junto al mar, ese mar totalmente bravo empujado por los vientos del suroeste. Por desgracia, se ha convertido en algo habitual que la zona de El Palmeral prácticamente desaparezca en cuanto hay oleaje y el agua llega a rozar la puerta del chiringuito. Las mangueras y las tapas de alcantarilla quedan totalmente expuestas, dejando bien claro que esta zona necesita recuperar arena porque el Mediterráneo se ha ido comiendo poco a poco los metros de playa.
Por el Paseo Marítimo apenas unos pocos valientes que se animaban a hacer algo de deporte. También curiosos que sacaron el móvil para hacer fotos y vídeos del temporal, con la bandera de España junto al Auditorio Maestro Padilla totalmente recta, así como la de la capital en la rotonda de la Térmica. La arena que salía despedida por el viento molestaba y caminar se convertía también en una lucha constante a causa de las imponentes rachas de viento. Eso sí, los windsurfistas aprovecharon una tarde magnífica para echarse al agua y disfrutar del oleaje en varios puntos de la capital.
Algunos parques de Almería, como el de Oliveros, tuvo que echar el cierre por el viento para limitar riesgos. Otra zona que prácticamente quedó desierta fue el paseo marítimo junto a la desembocadura del Río Andarax. Aquí también suele haber ambiente porque hay material para hacer deporte junto al mar, pero al tratarse de una amplia área sin edificios alrededor que parasen el fuerte viento, quedó desangelada. Como curiosidad, desde ese lugar privilegiado se podía ver la panorámica de Almería con la fuerza del mar y del temporal con la Sierra de Gádor detrás.
Aunque de momento no se esperan precipitaciones, este temporal de viento del suroeste golpea a la provincia y en especial en zonas de costa al estar menos resguardadas. Seguro que muchos almerienses vieron alterada la rutina de salir a caminar por el Paseo Marítimo porque costaba mantenerse en pie y la arena también golpeaba.