Almería tiene la mitad de albañiles que hace una década y no hay donde hallarlos
En el boom de la construcción había 36.000 trabajadores en la provincia; ahora son 18.000

Las empresas de la construcción echan de menos especialistas.
Cada vez menos jóvenes almerienses que se acercan al andamio, no hay relevo generacional en el gremio de la albañilería, un sector que llegó a ostentar el 20% de la población ocupada de la provincia. Las cifras no dejan lugar a dudas: en 2008, cuando aún no se había agujereado la burbuja, Almería tenía 36.000 trabajadores afiliados en el sector de la Construcción y al cierre de 2022 se han quedado en 18.300, justo la mitad en apenas 15 años.
Qué ha pasado por el camino: probablemente que quizá, en los días de vino y rosas que gravitaron en torno a 2005, el censo estaba inflado porque había demanda y generosos salarios; ahora, sin embargo, con las sucesivas crisis los sueldos han menguado y la demanda es más cíclica. Por tanto, lo que se entiende que ha podido ocurrir en esta década y media con el palustre y el hormigón es que muchos de los empleados que llegaron de aluvión han vuelto a sus dedicaciones originarias más vinculadas a la hostelería o al invernadero. El resultado es una carencia de mano de obra en la promoción residencial de la provincia que hace que haya aumentado la necesidad de emplear a trabajadores extranjeros, cerca de 5.000 en la actualidad.
Así lo atestigua el presidente de la Asociación de Promotores de Almería, Juan Murcia, que agrupa a unas 30 empresas del sector. “Falta mano de obra y sobre todo faltan especialistas, cada día más, no hay un aprendizaje adecuado del oficio y cada vez lo estamos notando más, la formación profesional cubre algunas necesidades, pero no todas como se está viendo”, explica Murcia.
En Almería hay un paro juvenil cercano al 30% en menores de 25 años, pero muy pocos quieren trabajar de albañil, según los datos oficiales del Instituto Oficial de Estadística.
Sin embargo, a priori, si se compara con otro tipo de dedicaciones laborales, el de la Construcción no sale mal parado del todo: no se trabaja los fines de semana como en la hostelería o el sector turístico y, además, el salario medio está muy por encima del salario mínimo que acaba de aprobar el Gobierno. Prorrateando los distintos convenios específicos, oscila en torno a lo 1.500 euros brutos mensuales. Lo que más se necesita son especialistas del tipo de los encofradores, carpinteros, gruistas, ferrallistas, capataces y alicatadores, según la consultora Adecco.