Desde hace varias semanas se repite como un mantra recordar que la salvación pasa por el Mediterráneo. Con esta convicción, afianzada tras el gran triunfo del pasado fin de semana frente al Granada, el duelo de esta mañana ante el Rayo Vallecano agiganta su importancia para los almerienses, ya que es el desplazamiento más ‘asequible’ de los tres que aún tiene que realizar. Luego habrá que viajar al Bernabéu y al Sánchez Pizjuán. Con siete jornadas todavía por delante, los resultados de los dos próximos partidos marcarán la tendencia, al alza o derrotista, antes de encarar una recta final en la que el Almería habrá de enfrentarse a rivales de la zona media y alta de la tabla.

Hambre de puntos El buen sabor de boca que han dejado en los aficionados rojiblancos las dos últimas actuaciones de su equipo, invitan  a pensar en la posibilidad de que esta mañana en Vallecas (12:00 horas / Canal + Liga / GolT) el Almería pueda dar un paso de gigante hacia la salvación con la conquista de los tres puntos para seguir remando con firmeza hacia la permanencia. Lo pupilos de Sergi tienen la obligación de hacer que el hambre y la necesidad se impongan ante un rival saciado porque a estas alturas del campeonato ya tiene asegurada su continuidad, primer y único objetivo del cuadro de la barriada madrileña de Vallecas. Los puntos deben de viajar a Almería no porque el Rayo no sea un rival duro de pelar, ni porque el escenario no intimide, sino porque los almerienses tienen que poner lo que hay que poner sobre el césped para demostrar que ellos son los que se están jugando los cuartos y el futuro en el envite.
La situación del Almería y la cercanía de la meta no admiten errores. Un mínimo despiste  puede ser fatal para la suerte final del club en la presente edición de la Liga en Primera División.

El camino El Almería ya conoce el camino del éxito señalado por sus dos últimas actuaciones. Mantener la línea de juego, concentración, solidaridad y garra será las bases para doblegar a un contrario especialmente motivado por la goleada sufrida en la jornada anterior que querrá hacer sangre al Almería este domingo.
El entrenador Sergi Barjuan ha venido poniendo todo lo que estaba de su parte para que hoy sus pupilos puedan dar un zarpazo en la zona baja de la clasificación: Una semana cargada de trabajo, con doble sesión de entrenamiento e incluso sesiones personalizadas con jugadores para mejorar aspectos tácticos y estratégicos.
Por si el partido no presentara suficientes alicientes e incentivos para los rojiblancos se da la circunstancia de que los hombres que designe Sergi Barjuan tendrán en sus manos, o sus botas, el romper el dominio de Paco Jémez en las confrontaciones con el Almería al frente del Rayo con tres triunfos consecutivos de los rayistas, dos veces 0-1 en el Estadio Mediterráneo y 3-1 en Vallecas.