Hay que estar preparados para todo
Muchos equipos de Primera están en venta y Alfonso García no es alcalino como las pilas

Alfonso García está motivado pero los clubes son una tentación.
Cuando veo que se vende el Valencia o el Getafe negocia un cambio de maños me paro a pensar en lo que pasaría en esta tierra si viniera un señor adinerado y comprara el Almería. No se si estamos preparados para ello.
Desde la noche de los tiempos en esta ciudad hemos sido del Almería de Ángel Martínez, Franco Navarro, García Sánchez, Augusto Arteaga, José Meca, Miguel Orta, Gómez Pomares o Guillermo Blanes: todos ellos tan valientes como aquel Gómez Angulo del Almería Atlético cuando subió a Segunda en 1958.
Yo no he conocido un Almería de fuera y hasta en los tiempos de la gran guerra Ceefe-Poli los dos clubes eran con denominación de origen almeriense.
No creo que Alfonso vena un proyecto que le ilusiona y que le está dando resultados. No lo ve dando salida a su sueño sin acabar la Ciudad Deportiva pero tenemos que estar en alerta ya que el Almería es barato en Primera División.
Aquí no vendemos deuda. Aquí no hay que hacer una gran inversión económica y, además, las instituciones arropan al club en la medida de sus posibilidades.
Yo no lo he conocido en 55 años de vida pero tenemos que estar preparados porque mis hijos y mis nietos pueden conocer un Almería con capital forastero y un presidente de Islas Candongas llegado el caso.
Alfonso está fuerte y ha montado una estructura sólida de club pero no es alcalino como las pilas y también se cansa el hombre de cargar con esa cruz que llevaron a cuestas sus antepasados en el cargo sin un euro y criticados por el solo hecho de ser presidentes del Almería.
Antes se decía en Almería que los presidentes se llevaban los cuartos y más de uno acabó arruinado: vaya tela.