Fantástica fiesta de fútbol sala  la que se vivió en el Pabellón de la Villa de Gádor con la visita del F.C. Barcelona y su estrella gadorense, Juan Emilio, que fue la atracción de principio hasta el final con la entrega de trofeos porque los aficionados inundaron la pista, querían fotografiarse con su ídolo  internacional a sabiendas que llevaba la casaca alzugrana, pero hay que tener en cuenta que un gran numero de habitantes de Gádor son culés, empezando por su alcalde Eugenio Gonzálvez. Antes de comenzar el encuentro los mas de mil doscientos aficionados que cubrieron el graderío, demostraron el por qué de su presencia, que no era otro que el regreso de un gran jugador de fútbol sala de la localidad llamado Juan Emilio que se marcho a un gran club como es el F. C. Barcelona para seguir creciendo en esta disciplina deportiva que tanto le apasiona. Recibió una ovación de gala cuando fue presentado ante la afición. El primero de los gadorenses, el alcalde Eugenio Gonzálvez, estaba emocionado de ver el aspecto que presentaba el pabellón y comentaba que era una maravilla ver “que en una localidad tan pequeña se este viviendo en esos momentos un evento deportivo tan importante. Colgaremos de lo más alto del pabellón la camiseta de Juan Emilio para la cantera”.

El Barça no se relajó

El partido fue vibrante por la calidad del conjunto azulgrana que dio todo un recital en la pista frente a un voluntarioso equipo gadorense que en ningún momento fue capaz de contrarrestar la velocidad con que movían el balón en cada uno de los contragolpes, destacando la estrella gadorense Juan Emilio que incluso marco un gran gol que sería el tercero de los nueve tantos que encajaron los dos guardametas del C.D. Gádor en un partido-fiesta.
Ha crecido como jugador y persona desde que se marchó a La Masía, lo ha demostrado en su vuelta a casa y en el pabellón que le vio crecer, su descubridor, Gaby, fue el que mas se emocionó con haberlo tenido de nuevo tan cerca, igual que los mas de mil doscientos espectadores que han dado colorido al gran evento vivido en el Pabellón de la Villa de Gádor con el partidazo de futbol sala que servirá de espejo para toda la cantera gadorense.

No llegó para todos

El jugador se vino de Barcelona con las maletas cargadas de camisetas y regalos pero “no ha llegado para todos y volveré en el verano”. Se encontraba feliz en casa “recordando viejos tiempos porque ahora mi vida son los estudios y el Barça”. Se hizo fotos con su alcalde y con los amigos del alma a los que “agradezco el ambiente que han dado al partido, una vez más mi pueblo ha dado la talla a nivel deportivo”.