Hace unos días en las páginas de LA VOZ el presidente del Almería pedía un plus de “3.ooo abonados más” para dejar solo mil entradas en taquilla. Las cifras eran buenas pero alejadas de un récord importante y a las nueve de la noche de este viernes se cerraban las puertas de la sede y el plazo de renovación de abonos.

Todo ha ido bien

No se han batido registros y los números pese a ser buenos no son demasiado positivos. Se esperaba igualar como mínimo el número de abonados de la pasada temporada y no ha sido posible. El presidente no se siente frustrado por ello y considera que “igual los que no han renovado es porque no pueden realmente sacarlo”. Dice que son baratos los precios tanto del abono como de las entradas pero “vamos a intentar que ahora haya un impulso nuevo y se consiga dejar el campo como a todos nos gustaría. No es muy grande, son solo 15.000 butacas”.

Su mensaje

Para el presidente del Almería poco se puede hacer más. Estamos en tiempos difíciles y “con el abono se ve al campeón, al Madrid y al Barça”. Además ha bajado el precio de las entradas para los partidos de la Liga con la intención de facilitar el acceso al estadio a aquellos que por motivos de trabajo no se pueden abonar. Todo son facilidades pero “es que uno se debe sentir orgulloso de ser abonado del Almería. A mí me da mucha alegría cuando el equipo gana y me llaman amigos y aficionados. Ese es mi mensaje, que se viva ser abonado de este club que está en Primera”.

No va más

El presidente del Almería lleva muchos años tirando del carro. Unos en Segunda y otros en Primera pero siempre “con una gran ilusión y sabiendo que estar en la élite es lo máximo para una provincia. La repercusión de nuestra Liga es incalculable y vivir los partidos en el Mediterráneo es el no va más”.
Dice Alfonso que es optimista y espera dejar solo mil entradas a la venta en taquilla, “porque lo pide la Liga” y si no se logra el objetivo seguirá en la pelea ya que confía en sumar cada año más abonados y “más sentimiento rojiblanco que es lo que hay que tener en una ciudad y en una provincia”. Pasó el primero de los cortes la campaña de abonados. Ayer se cerró el plazo y los números se mantienen según lo esperado.

Salen las cuentas

La política económica es la que manda en el Almería. El club no vive de la campaña de abonos y las fuentes de ingresos son otras pero “la imagen de un campo lleno de aficionados y lo que aporta al equipo solo lo dan los abonados”. Vamos a esperar y hablaremos.