Si la pasada temporada empezaron Esteban y Ustari. Si luego llegó Julián Cuesta desde Sevilla y remató la faena: no nos podemos quejar.

Pero esta temporada el presidente ha creado una competencia en la portería de la que ha carecido en equipo desde 2011 cuando se bajó a Segunda y Esteban se hizo dueño de la situación.

Para la próxima temporada vamos a contar con dos porteros de mucha entidad. Tenemos a Julián que lo conocemos de entrenar pero no de actuar bajo los palos y llega Rubén que forma parte de la familia ya que paró todo lo que pudo con el Rayo.

No tendrá Francisco queja de los porteros que partirán de cero. Estamos ante una situación nueva para el entrenador y sus metas. Tenemos a los que apuestan por Julián y a los que hablan maravillas de Rubén.

Toda la competencia del mundo desde el primer entrenamiento. Julián ha firmado por el Almería para ser el portero del presente en la Liga de las Estrellas mientras que a Rubén le avalan sus actuaciones en Primera.

Cambiar de portero de una temporada para otra está bien pero hacerlo en Liga depende de muchos factores. Pueden preguntarle a Cobeño cuando tras ser sancionado llegó a la portería Diego Alves y ya nadie se la quitó.

De porteros estamos bien pero faltan un par de SUSOS.