Una Clásica espectacular en su edición número 29. ¡Cómo pasa el tiempo, cómo pasan los años!, dirá José Manuel Muñoz, director de la Clásica Ciclista, un hombre que es el alma de una prueba que se ha consolidado en el ciclismo a nivel nacional e internacional.
La salida de la Clásica Ciclista de Almería fue espectacular desde la Rambla, donde los ciclistas llegaron una hora antes para el control de firmas.
El corte de la cinta abrió de par en par el recorrido al pelotón para hacer el itinerario por el Poniente almeriense. Había por delante un total de 178 kilómetros. Roquetas de Mar esperaba con ilusión a los ciclistas en una edición que ha llegado, gracias a la televisión, “a todos los rincones de Europa”, recordaba en la previa el director de la Clásica Ciclista.

Solidaria  La Clásica 2014 ha sido muy solidaria, ya que la carrera junto con las instituciones, las empresas patrocinadoras y colaboradoras de la carrera se han unido en una iniciativa solidaria para que con motivo de la prueba haya habido una recogida de alimentos.
Esta recogida se hizo en el control de firmas, donde hubo un vehículo del Banco de Alimentos para recoger dichos alimentos que la sociedad almeriense, en una muestra de su solidaridad aportó para esta noble causa. Esto se repetió en Roquetas con motivo de la llegada.

La llegada Fue impresionate con una afición entregada desde primera hora de la tarde. El sprint fue emocionante y el irlandés Sam Bennett, del equipo alemán del Team NetApp-Endura, fue el más rápido después de los 178 kilómetros en la 29ª Clásica. Hizo un tiempo de 4 horas, 21 minutos y 33 segundos. La edición de este año sacó sobresaliente con una organización que estuvo sobresaliente.