Nauzet y Alcaraz dieron otro aire al Almería
Buenas sensaciones en la Copa

Alcaraz en el entrenamiento.
El partido ante el Cádiz es de los que estaba llamado a dar mucho de sí a la hora de analizarlo, por las muchas caras nuevas que saltaron al Ramón de Carranza con la camisola rojiblanca. En líneas generales todos cumplieron. El equipo estuvo muy sólido en defensa, a excepción de una pérdida de balón y una mala cesión, hasta el punto de que Fernando Martínez sólo se vio exigido en dos ocasiones. En la medular, Verza fue el faro que alumbró el juego del equipo, con la lógica falta de compenetración con sus nuevos compañeros.
Lo más importante es que puso de manifiesto que está preparado para debutar el sábado ante el Lorca. En la segunda mitad, Trujillo entró por Joaquín, uno de los dos titulares que alineó Ramis respecto a la Liga. Perfecto en el cruce, insuperable en la marca, falló a la hora de disputar la pelota por arriba, lo que propició un peligroso remate de los locales.
Nauzet Alemán entró por el chino Lin. Se colocó en la zona izquierda y dio muestras de calidad, pero también de estar aún bastante lejos de lograr la forma física necesaria para competir en una categoría tan exigente como la Liga 1|2|3. Su presencia incomodó al lateral encargado de taparlo, Rober Correa.
El último en entrar fue Rubén Alcaraz para que Caballero descansara. Su presencia potenció el poder ofensivo del equipo, que tuvo más llegada, pero sin culminar.