Saben los que están dentro del club, Corona el primero, que esta historia no es nueva en el Almería y espero que sea la última vez que les escriba sobre ella. Nos estamos equivocando. No cambiamos.

El Almería tiene dos formas de fichar:

1ª) Se hace una lista y se va puliendo.

2ª) Todo el poder y la gloria al entrenador y que firme lo que quiera.

Pero las dos (utilizadas en las brillantes últimas temporadas) tienen un denominador común: hasta que el presidente no da la orden aquí no ficha ni Dios. Que me perdone el padre Pozo por la expresión.

Dice Corona que Alfonso “es una ayuda y cuatro ojos ven más que dos”, vamos que “es inestimable el concurso del presidente” pero sabiendo que es un negociador: le gusta regatear.

Le quiero recordar a Miguel Corona que otros Almerías (este mismo) en los tiempos de Blanes lo tenía claro y sin tantos despachos en un piso de 90 metros cuadrados que era su sede, lo hacía mejor.

Blanes, Manolo García y la Comisión Deportiva, que era exactamente igual que la Dirección Deportiva, iban a por un futbolista para firmarlo hasta su casa.

Tan fácil como querer a Charles. Mandaban a un emisario con ‘manteca’ y el contrato en la mano. Si no lo fichaba mejor que no regresara a Almería.

No es broma, así hizo Blanes las mejores plantillas del Almería. No hacía muchos fichajes de estos pero si tenía claro que Paco Luna era su 9 subía a Macael en la Alsina y se traía el contrato firmado.

La moraleja es grande y el club tiene ejemplos (a miles) de futbolistas que se han perdido jugar en el Almería porque Benito lo tenía hecho y había que esperar la decisión de Águilas.

Basta preguntar a Soriano lo que tenía una semana y lo que se encontró a la siguiente. No hace tanto Miguel.

El Almería tuvo un director deportivo apalabrado con una lista de jugadores de garantía y por dejarlo unos días se fue a otro club de Segunda con todos los jugadores. Viste de azul. Soriano no se recuperó de este palo.

En fin, para qué dar ideas, mira que me gusta perder el tiempo en asuntos que no van a cambiar.

De que vale cambiar al director deportivo si no mejoramos la forma de fichar jugadores.

Vaya por delante que Corona ha hecho en una semana lo que otros en un mes. Pero todo es mejorable.