El barrio de Plaza de Toros sigue conmocionado con el crimen que tuvo lugar en la tarde de este miércoles en calle Arqueros, donde Manuel, vecino de 79 años de edad, fallecía junto a la puerta de su domicilio tras ser apuñalado por su hijo, que fue detenido horas más tarde en la cafetería Bombón de El Zapillo.

Según ha podido conocer LA VOZ, la relación entre padre e hijo no era buena y en varias ocasiones los propios vecinos de esta barriada de la capital almeriense fueron testigos de discusiones y conflictos familiares entre ambos. Además, el presunto autor del crimen, que fue arrestado en el citado negocio hostelero al que llegó alterado, manchado de sangre y diciendo "acabo de matar a mi padre",  acumula un largo historial de delitos.  

Desde Policía Nacional confirmaban en la mañana de este jueves que al detenido, que se llama Andrés y tiene 51 años de edad, le constan múltiples reseñas por robos, amenazas y violencia de género. 

De calle Arqueros hasta El Zapillo: así fue el crimen

Alrededor de las 18:30 horas, Manuel, un conocido vecino de esta barriada de la capital almeriense, solicitaba auxilio junto a la puerta de su casa, el número 25 de la Calle Arqueros, donde acababa de recibir varias puñaladas. "Una herida de arma blanca en el cuello", según la Policía, fue la que causó la muerte del finado, aún por confimar oficialmente vía autopsia.

Una vecina, alertada por la situación, realizó una llamada al servicio de Emergencias 112, desplazándose hasta el lugar sanitarios del 061, que intentaron estabilizar al herido sin éxito, y unidades del Cuerpo Nacional de Policía. Previamente, según fuentes policiales, dos ciudadanos habían intentado mantenerle con vida realizando maniobras de reanimación.

Según ha podido saber LA VOZ, Manuel se encontraba dentro de su domicilio cuando sufrió la agresión y varios testigos afirman que su agresor huyó del lugar "en un patinete eléctrico" y que llegó a arrojar "un cuchillo de grandes dimensiones" en la Avenida Vílches, una vía paralela a la calle en la que tuvo lugar el apuñalamiento.

Agentes de la Policía Local, que tenían la descripción del supuesto autor de las puñaladas, se personaron en el domicilio donde solía pernoctar el hijo de la víctima, en calle Jaúl Bajo de El Zapillo, siendo avisados por una vecina de que el presunto agresor se encontraba en una cafetería cercana, 'Bombón', a la que habría llegado diciendo "acabo de matar a mi padre".

Alrededor de las 19:50 horas se produjo la detención por parte de los agentes de Policía Local del varón de 51 años de edad, que no opuso resistencia.

Mientras, en Calle Arqueros, se procedía el levantamiento del cadáver con la presencia de agentes de la Policía Nacional y de Medicina Legal Forense y bajo la mirada de incredulidad de decenas de vecinos de la Plaza de Toros.