La pasada semana, la Policía Nacional presentaba en Almería los resultados de una operación contra el narcotráfico que permitió intervenir 15 toneladas de hachís venidos desde Nador en un camión que transportaba  sandías y ocultaba fardos de droga. La importancia de la operación se medía en la llegada a Almería de todo un peso pesado policial: el comisario principal Antonio Martínez Duarte, jefe de la Unidad Central de Drogas y Crimen Organizado (UDYCO), al que ha podido entrevistar LA VOZ.

- ¿Cuál es la situación actual del crimen organizado en la provincia de Almería?

Es una situación análoga a la de otras provincias. Un crimen organizado muy activo, multidisciplinar, que se dedica a muchas cosas, a muchas actividades delictivas. Mientras que la base sigue siendo el tráfico de drogas, pueden dedicarse a otros negocios: tráfico de armas, blanqueo de capitales... Y Almería no tiene un crimen organizado distinto al resto. 

Estamos prestándole especial atención a esta zona desde hace tiempo porque, gracias a la presión que ha estado haciendo Policía Nacional y otras fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado en el Estrecho de Gibraltar, hemos visto cómo claramente las organizaciones de lancheros se han ido moviendo. 

Es verdad que siempre había habido trafico de hachís por esta costa y este puerto, pero en los últimos años estamos viendo cómo hay una deriva clara hacia Almería, la costa de Granada y el Levante. 

Esto es fruto de la presión que estamos haciendo. Hemos notado también un incremento del trafico de hachís y de cocaína a través de los ríos Guadalquivir y Guadiana y lo que nos ha hecho reforzar nuestro interés y nuestra intención en esta zona es que hemos visto armas de guerra en algunas de las operaciones y el desplazamiento del hachís por la cocaína. 

Esto hace que los clanes de la droga se muevan, que los tradicionales clanes dejen paso a las nuevas organizaciones del Este de Europa que quieren posicionarse en el mundo del narcotráfico de cocaína y tenemos que estar prestando atención desde el principio para que esto no llegue a ocurrir. Que no haya grupos criminales que desbanquen a otros, sino que directamente vean que no tienen posibilidad de trabajar gracias a la presión policial.

- La idea es que no vean Almería como una puerta abierta y sin vigilancia al narcotráfico...

Efectivamente. Y tenemos muy claro que la única forma de trabajar contra estas organizaciones es con ayuda internacional. En todas las charlas que damos desde la Comisaria General de Policía Judicial repetimos que la clave está en la cooperación, coordinación y colaboración. Para nosotros es básico. 

La cooperación internacional, la colaboración con otras policías y  saber que Policía Nacional es un referente a nivel internacional en la lucha contra el narcotráfico. Tenemos la unidad más antigua en la lucha contra el crimen organizado y el tráfico de drogas, la Brigada Central de Estupefacientes, que es del año 67 y desde ella potenciamos la colaboración a diario. 

Hablamos con muchísimas policías día a día. En este caso, ha sido la francesa y la marroquí, pero es algo diario. Eso es la colaboración internacional y luego tenemos la coordinación. Desde la UDYCO central queremos estar en contacto a diario con UDYCO Costa del Sol, Almería, Cádiz... Coordinamos todas las investigaciones que se llevan a cabo contra el crimen organizado y el trafico de drogas. Hay un coordinador en la jefatura superior de Andalucía oriental, otro en Andalucía occidental y yo como jefe de la UDYCO central. De esta forma conseguimos estos resultados exitosos de colaboración. 

Respecto a esta operación, ya lo teníamos todo preparado en el seguimiento hacia Francia cuando vimos que había un dispositivo de contravigilancia, coches que estaban vigilando el transporte de esta droga y fue lo que nos obligó a intervenir en la nave.

- Cada zona tiene sus características, pero Almería, con el litoral, el puerto, el transporte por carretera, las plantaciones en invernaderos... ¿Es la provincia de Almería un coctel perfecto?

Sí, es un coctel perfecto, pero también es verdad que la UDYCO y las unidades de Policía Judicial de esta zona tienen mucha experiencia. Trabajamos desde comisaria general casi permanentemente, llevamos a cabo muchas investigaciones conjuntas. Para nosotros las actuaciones para intervenir droga están bien, porque es lo que nos va a permitir desarticular el grupo y llevar a cabo la investigación patrimonial o de blanqueo, pero para nosotros lo verdaderamente importante es desarticular el grupo, es detener a los cabecillas, es golpearle en lo que más les duele, que podamos llevar a cabo una operación en la que están implicadas Marruecos y Francia... Eso es lo verdaderamente importante.

- Para llegar a ese punto hay meses y meses de trabajo. Esto no es como las películas y las series, en las que se desmonta un clan en un visto y no visto.

Claro, cuando Francia se pone en contacto con nosotros, porque piensan que van a recibir una importante partida de hachís y que la organización logística se encuentra en España empiezan a facilitarnos datos que es lo que nos hace empezar a movernos en distintos ámbitos: en Costa del Sol, en la provincia de Almería... Eso es lo que da el resultado exitoso, siempre en colaboración con la Audiencia Nacional y con la Fiscalía Especial Antidroga, que nos ayuda muchísimo.

- Se ha cumplido hace poco un año del asesinato de dos agentes de la Guardia Civil en Barbate. ¿Estáis detectando que aumente la violencia contra la Policía?

Afortunadamente no aumenta la violencia contra Policía... Lo de Barbate fue una salvajada, pero afortunadamente no es una cosa del día a día. 

Sí notamos que hay más vuelcos entre ellos, que el uso de armas y de protección es porque quieren robarse la droga. Hay muchos grupos criminales peleando por zonas muy concretas, zonas que ya tienen sus propios jefes. Es ahí donde tenemos que intervenir, para que no haya posibilidad de que estas organizaciones quieran hacerse con territorios. El territorio es de la ciudadanía, del Estado, y nosotros no podemos permitir que nadie intente conquistar un territorio que nos pertenece a todos.

- El trabajo del día a día os permitirá vaticinar en cierta medida cómo es el panorama más inmediato tanto en el narcotráfico como en el consumo de drogas.

El consumo está subiendo... Los últimos datos hablan de un incremento del consumo de la cocaína y el hachís. España es el segundo país que mas cocaína consume después de Reino Unido, siempre en los puestos de cabeza. Y hay una sobreproducción de cocaína y hachís y se está cultivando mucha marihuana 'indoor' en España. Pero también hemos notado que el trabajo se está viendo, se refleja en que están buscando otras vías para entrar, evitan los puertos de Holanda, Bélgica y España, que son puertos muy golosos para ellos, pero el año pasado intervenimos 13.000 kilos en Algeciras, y desarticulamos una organización que tenia prácticamente el monopolio del envío de cocaína desde Ecuador. Las organizaciones tienen que reinventarse por la presión policial...

- En Almería, con la importancia que tiene el transporte por carretera de mercancías agrícolas, también importa y mucho la vigilancia logística de camiones. Al fin y al cabo, lo que entra por el mar o se mueve por Almería no es para la provincia, sino que va destinado a Europa, ¿no? Solo somos la puerta de entrada...

Efectivamente. Todo lo que entra por estas costas o por este puerto no se queda aquí. Este cargamento de 15.000 kilos, tal y como venía distribuida la droga, estaba claro que todo tenia su encaje en el transporte hacia Francia. Incluso lo que no son los fardos tradicionales, lo que son las batatas, tienen forma para una frontera. No se han comido la cabeza para esta frontera, era para la de Francia.