Decenas de marroquíes salen a la calle para convalidar sus carnet de conducir
Los manifestantes piden un acuerdo entre España y Marruecos para poder homologar el permiso de conducción de su país

Manifestantes a las puertas del consulado de Marruecos
La Dirección General de Tráfico (DGT) establece que solo se pueden homologar los permisos de conducir obtenidos antes de adquirir la residencia legal en España. Esta norma busca evitar que personas ya residentes obtengan licencias en países "con normativas menos exigentes", lo que, según las autoridades, podría suponer un riesgo para la seguridad vial.
Sin embargo, esta disposición afecta de forma directa a miles de personas que, tras establecerse legalmente en España, han obtenido sus permisos de conducir en sus países de origen. Para ellas, la única vía legal para conducir en territorio español es iniciar el proceso completo para obtener un nuevo permiso: clases y exámenes. Un procedimiento costoso en tiempo y dinero.
En provincias como Almería, donde el trabajo agrícola y los desplazamientos diarios son parte esencial del día a día, la norma representaría un obstáculo significativo para muchos. No poder canjear su carnet implica no poder conducir legalmente hacia el puesto de trabajo, lo que a menudo deriva en sanciones graves que ascienden hasta 500 euros o más.
La paradoja es evidente: muchas personas necesitan el coche para acceder a sus empleos, pero hacerlo sin carnet válido se exponen a repetidas multas que convierten las ganancias de sus salarios en pérdidas. “Trabajo por 50 euros y vuelvo a casa con una multa de 500” comenta uno de los manifestantes.
Ante esta situación, varios colectivos migrantes se han movilizado este lunes 21 de abril en varios puntos de España, para solicitar una revisión de la normativa. Piden que se permita canjear los carnets de conducir obtenidos en el país de origen, incluso si fueron expedidos después de haber adquirido la residencia en España.
En este contexto, decenas de ciudadanos marroquíes se han concentrado frente al Consulado General del Reino de Marruecos en Almería para exigir que los gobiernos de España y el de la monarquía alauita establezcan un acuerdo bilateral que permita reconocer los carnets de conducir emitidos tras la obtención de la residencia legal en territorio español.
Manifestación
A las 10:00 horas, la marcha —en la que participaban numerosos trabajadores del campo almeriense— partió desde las puertas de la Jefatura de Tráfico de Almería, en la Avenida Federico García Lorca.
Escoltados por la Policía Nacional y portando banderas de España, Marruecos y Amazigh, así como retratos de los monarcas de ambos países y pancartas en español y árabe con consignas como “No somos ilegales, somos conductores responsables”, los manifestantes recorrieron las calles de la ciudad hasta la oficina consular marroquí, atravesando el puente de la Avenida del Mediterráneo.
La movilización fue coordinada por el Sindicato Andaluz de Trabajadores, la Asociación de Amigos de la Consulta sobre Asuntos de Inmigración, La Voz Marroquí de la Comunidad Valenciana y Asociación Recreativa Deportiva Amazogh de Alginet (Valencia).
Según los manifestantes, su objetivo no es eludir controles, sino integrarse plenamente en la sociedad y acceder a su derecho a la movilidad en condiciones seguras y legales. La periodista de La Voz del Migrante, Rachida Navarro —presente en la manifestación— subraya que las leyes deben respetarse, y que infringirlas puede acarrear sanciones, pero considera que esta “polémica administrativa” podría resolverse si ambos países alcanzan un acuerdo de convenio entre ambos países.
Asimismo, la periodista hispano-marroquí recuerda que esta problemática no afecta solo a la comunidad marroquí, sino al conjunto del colectivo migrante. “Ellos están aquí para pedir que ambos países se sienten a negociar y les den la oportunidad de canjear su carnet. Porque, día sí y día no, les están multando con 500 o incluso 1.500 euros”, afirma.
Exámenes
Algunos manifestantes, como Yunes, señalan que no verían con malos ojos realizar un examen práctico. Sin embargo, consideran que el principal obstáculo es el examen teórico, que supone no solo un desafío en términos de conocimientos, sino también por las dificultades derivadas de la barrera idiomática.
En 2024, España y Marruecos alcanzaron un acuerdo para facilitar el canje de permisos de conducir. Según este convenio, los ciudadanos marroquíes con residencia legal en España pueden canjear sus carnets nacionales por equivalentes españoles sin necesidad de realizar la prueba teórica. No obstante, para las categorías profesionales —C (camiones), C+E (camiones con remolque), D (autobuses) y D+E (autobuses con remolque)— se mantiene la exigencia de superar una prueba práctica en vías públicas.
Pese a este avance, la aplicación de esta medida no ha sido inconsistente, volviendo a virar hacia la normativa actual. Mientras tanto, las personas afectadas continúan reclamando una solución efectiva que les permita ejercer su derecho a la movilidad sin poner en riesgo su sustento ni su estatus legal.