Unanimidad mostraron los diferentes grupos políticos que conforman el pleno del Ayuntamiento de Almería ante la moción presentada por Ciudadanos para rechazar el transfuguismo.

A pesar de que era lo esperable, lo cierto es que la moción tomó relevancia en el momento en el que el concejal no adscrito, Joaquín Pérez de la Blanca, decidía hacer un alegato para defenderse de aquellos que le tildan de tránsfuga y explicar la diferencia con un no adscrito.  “No lo digo yo, sino ustedes en ese mismo pacto. No me vale luego que vengan con interpretaciones doctrinales y sesgos ideológicos. Para que alguien sea considerado tránsfuga tiene que realizar la acción de pactar con otras fuerzas para cambiar o mantener la mayoría gobernante, o dificultar a esa mayoría el Gobierno de la ciudad”.

Explicaba el concejal no adscrito que en la capital el alcalde “fue investido con el apoyo de Cs y Vox, con tres votos más de los necesarios” y afirmaba rotundo que “solo y en el hipotético caso de una moción de censura, con un candidato alternativo y proyecto ciudad, si votara en un sentido diferente a la formación que abandoné, o de las razonables expectativas que depositaron sus votantes, solo en ese caso, podría cambiar la condición” y pasar de ser no adscrito a tránsfuga.

Respeto

Ante esta exposición, Pérez de la Blanca reclamó “el respeto al concejal no adscrito que ostento”.

Ante este alegato, el propio proponente de la moción, Miguel Cazorla, llegó a reconocerle a Pérez de la Blanca que “no es ningún tránsfuga, de momento”.

Curioso fue el cierre de la votación realizado por parte del alcalde de la capital, Ramón Fernández-Pacheco, congratulándose no solo de la unanimidad entre todos los grupos sino de que “en la ciudad no haya habido nunca ningún o ninguna tránsfuga”. Quizá le recordaba al propio portavoz naranja la marcha de la concejal Mabel Hernández en la pasada Corporación municipal y su paso al Grupo de No Adscritos.

Más allá del debate sobre la terminología, lo cierto es que todas las formaciones que conforman el plenario votaron a favor de esta moción y aprovecharon el momento para, en todos los casos, reclamar el daño que hace el transfuguismo a los partidos porque todos lo han sufrido. Eso sí, hubo tiempo para que los representantes socialistas le reprocharan al PP y a Cs casos como los ocurridos en la Alcaldía de Huércal Overa, mientras los populares hicieran lo propio con la del municipio de Felix.

Y en es que estos casos se producen en todos los partidos, y en se ven perjudicados o beneficiados los dos más implantados en la mayoría de los casos. Pero todo dependerá del cristal con el que se mire.