La biotecnología como motor de innovación: Retos de futuro del sector agroalimentario
Retos y oportunidades de la biotecnología en la agricultura del futuro

Grupo Empresarial La Caña, participación congreso BAC.
Durante los días 9 a 11 de julio de 2025 se celebró en Málaga la edición número 17 del Congreso Anual de Biotecnología. BAC se ha convertido en una cita estratégica de encuentro entre investigadores, estudiantes y profesionales del sector biotecnológico, ofreciendo un espacio de interacción idóneo para compartir los avances del sector entre empresas biotech, centros de investigación, centros tecnológicos y universidades.
El Grupo Empresarial La Caña (GELC), participó con una ponencia en la sesión plenaria titulada: “Innovación en Agrobiotech: La revolución invisible del sector Agroalimentario” en la que se compartió una visión práctica sobre algunos de los retos de futuro que tenemos en el sector y como puede la biotecnología ayudar a afrontarlos.
La aplicación de los nuevos conocimientos en biología molecular y biotecnología con criterio industrial, escalable y práctico va a ser clave en los próximos años para avanzar en sostenibilidad, productividad agrícola y en la competitividad del sector agroalimentario.
En concreto, se desgranaron retos que se están abordando en el GELC, para los que hay avances biotecnológicos muy prometedores que están revolucionando el sector. Aunque muchos de ellos, aún no están consolidados en el terreno de juego de la innovación, en forma de soluciones escalables y viables para la industria.
Durante la conferencia se trataron los siguientes retos de futuro:
1. Desarrollo de un nuevo modelo agrícola ecosostenible y rentable.
2. Calidad, seguridad, funcionalidad y trazabilidad del producto.
3. Revalorización de productos, destríos y subproductos.
4. Digitalización, espacios de datos, Inteligencia Artificial.
5. Sostenibilidad Ambiental, Social y de Gobernanza.
Desarrollo de un nuevo modelo agrícola ecosostenible y rentable.
Nuevas técnicas de mejora genética
Se profundizó en la trepidante carrera por el desarrollo de nuevas variedades más productivas y resistentes a estrés abiótico y biótico, así como en los últimos avances en biotecnología, como la mutagénesis dirigida en general y el CRISPR-Cas en particular, que van a moldear el futuro del sector, con permiso de las novedades regulatorias europeas que están por venir.
Como ejemplo de proyectos que se están implementando en GELC, destaca nuestra plataforma de ensayos de nuevas variedades, destinada a obtener datos propios y concluyentes del interés agronómico y comercial de los nuevos avances. También se comentó nuestra participación en el proyecto Green Motion, que conforma una plataforma internacional promovida por la Universidad de California para acelerar la innovación y la introducción de nuevas variedades de aguacate en diferentes latitudes del mundo.
Nuevos bioestimulantes y productos de biocontrol
Los nuevos avances en las ciencias ómicas (genómica, metabolómica y proteómica) están permitiendo el desarrollo de nuevos bioestimulantes agrícolas a partir de extractos naturales como herramienta para combatir estrés hídrico y salino, optimizar el metabolismo secundario de la planta y la modulación de la expresión génica, potenciando la fotosíntesis, el sistema antioxidante y el metabolismo primario. Asimismo, se destacó el desarrollo de nuevas soluciones frente a plagas y enfermedades que inducen la respuesta sistémica adquirida de la planta, provocando estados de “alerta fisiológica” o priming.
Ejemplos de proyectos de investigación en los que participa y que desarrollan este reto son el proyecto europeo Realm: Reutilización del agua drenada por los invernaderos para cultivos de microalgas y desarrollo de nuevos bioestimulantes y el proyecto Tomagroup: Aplicación de enzimas específicas para liberar compuestos bioactivos del destrío del tomate con el fin de desarrollar bioestimulantes agrícolas.
Nuevas estrategias de manejo integrado con Fauna Auxiliar
Sumando de forma decisiva a la selección varietal y las nuevas generaciones de insumos agrícolas, el uso de Insectos beneficiosos para mejora de la polinización y el control biológico de plagas y enfermedades es clave para incrementar la productividad del cultivo y la disminución del uso de productos fitosanitarios.
En este sentido, han participado en el proyecto europeo Novel Pollinators, basado en el estudio del incremento de la capacidad de polinización de cultivos subtropicales mediante insectos beneficiosos como los sírfidos a través de una polinización complementaria a los himenópteros (abejas y abejorros) en una apuesta por la biodiversidad.
Digitalización de fincas y agricultura de precisión
Acompañando al avance en nuevas tecnologías de la información y comunicación, participan en varios proyectos con el objetivo de promover una agricultura más sostenible y rentable a partir de la creación de espacios de datos que agrupan información agronómica, fisiológica, metabólica y meteorológica, que nos están llevando a un nuevo escenario donde vamos a disponer de herramientas muy potentes para un manejo de los cultivos de precisión, preventivo y eficiente.
Un ejemplo de los proyectos que estamos abordando en este sentido es el proyecto europeo Iguess-Med, que trabaja la digitalización de invernaderos y el desarrollo de un sistema de apoyo para la toma de decisiones dirigido a la reducción de la huella hídrica, reducción del aporte de insumos agrícolas, desarrollo de algoritmos para el control preventivo de plagas y enfermedades y aumento de la productividad.
Microbiota y salud del suelo
La democratización y reducción de costes de la secuenciación masiva y el avance de la bioinformática, nos ha abierto un escenario que nos permite estudiar la microbiota del suelo como nunca hasta el momento. Conocedores de la importancia de la relación entre microorganismos y plantas y de la degradación de la calidad de los suelos de cultivo, tenemos un escenario apasionante para el desarrollo de nuevas soluciones prebióticas, probióticas y postbióticas que cuiden de la salud del suelo y nos permitan tener explotaciones agrícolas más productivas.
Desde el grupo la caña están participando en el proyecto Smartbiofert, en el que se están diseñando consorcios bacterianos que permitan al cultivo ser resiliente a condiciones de estrés hídrico y sequía.
Revalorización de productos, destríos y subproductos. Economía circular.
En Europa, se lleva hablando mucho tiempo de economía circular y de revalorización de subproductos, se ha avanzado mucho y hay unas posibilidades muy interesantes, pero aún queda muchísimo por hacer. Los destríos y subproductos vegetales ya no pueden ser considerados residuos. Hoy tenemos que verlos como recursos. Por una parte, tenemos la obligación moral reducir el desperdicio alimentario, se siguen tirando millones de toneladas por problemas productivos, excedentes de producción o de frutas que no acepta el mercado. Si sumamos las pérdidas en la distribución y lo que tiramos los consumidores finales, llegamos a cifras de hasta un 40% de desperdicio alimentario, suponiendo solo en España cerca de 8M de Toneladas.
Por otra parte, cuando uno sabe el valor que pueden tener muchos de los subproductos vegetales, nos encontramos ante una oportunidad para impulsar nuevas líneas de negocio.
Desde GELC llevan muchos años trabajando en proyectos en el ámbito de la economía circular y hemos avanzado mucho, aunque aún queda mucho camino por recorrer a nivel sectorial. El pasado 10 de junio se celebró la asamblea constituyente del Clúster Andaluz de Bioeconomía Circular en la que propusieron a GELC para la presidencia del mismo, lo que supone un reconocimiento del trabajo realizado en este sentido. Este clúster pretende ser una herramienta para impulsar la colaboración entre diferentes empresas, organismos públicos de investigación y administraciones para afrontar los retos de futuro, que no tienen otro camino que afrontarse a través de grandes proyectos colaborativos.
En la actualidad están desarrollando varios proyectos en los que están trabajando en la optimización de procesos biotecnológicos que incluyen fermentaciones microbianas controladas (lácticas, metanogénicas, líquidas, en medio sólido), para la estabilización de la materia prima y obtención de ingredientes biotecnológicos como proteínas bioactivas, conservantes naturales, ácidos orgánicos, antioxidantes, probióticos, postbióticos, bioplásticos y biopolímeros.
Estamos ante un cambio de paradigma en el que la biotecnología va a ser el eje central de la transformación agroalimentaria.
La sostenibilidad, la productividad agrícola y la competitividad del sector agroalimentario dependen en la actualidad de que sepamos aplicar el conocimiento biotecnológico con criterio industrial, escalable y práctico.
Necesitamos más que nunca a la ciencia, pero también necesitamos biotecnólogos con mentalidad aplicada, que entiendan los procesos y que sean capaces de dar solución a los retos que tenemos en el sector.