El pueblo de Almería donde romper ollas contra el suelo no es un problema, es una competición
Sorbas vuelve a celebrar el Día de las Ollas después de 2 semanas de espera por las lluvias

Participante del campeonato se prepara para lanzar su olla.
La lluvia obligó a retrasarlo, pero la espera ha merecido la pena. Sorbas ha vuelto a vivir su gran Día de las Ollas, una jornada en la que el pueblo se reencuentra con sus tradiciones y recupera el espíritu festivo de antaño. Esta segunda edición del evento, que debía haberse celebrado el 1 de marzo, ha llenado las calles de actividades, vecinos y visitantes que no han querido perderse esta peculiar celebración, que hunde sus raíces en la alfarería y en una curiosa costumbre: arrojar ollas a la puerta de aquellos con quienes se tenía una mala relación.
El Día de las Ollas se celebraba tradicionalmente el Miércoles de Ceniza, marcando el final del Carnaval y el inicio de la Cuaresma. Los jóvenes recogían durante el año piezas defectuosas de los alfareros para, llegado el día, lanzarlas a la puerta de aquellos vecinos con los que había rencillas. Una forma de catarsis, una señal pública de desaprobación que, con el tiempo, se fue perdiendo, pero que Sorbas ha querido recuperar como parte de su identidad.

Día de las Ollas de Sorbas.
A día de hoy, la tradición ha evolucionado hacia una fiesta que combina historia, gastronomía y artesanía. En esta jornada ha contado con talleres de alfarería, degustaciones de chocolate y piñonates, exhibiciones de pintura rápida y música en directo.
Cuanto más lejos mejor
Pero sin duda, el momento más esperado ha sido el la segunda edición del Campeonato Mundial de Lanzamiento de Olla, en el que los participantes demuestran su puntería y energía arrojando las piezas de barro.
El ambiente festivo ha contagiado a todos los rincones del pueblo. En la inauguración, han participado la vicepresidenta y diputada de Cultura, Cine e Identidad Almeriense, Almudena Morales, el delegado de Cultura, Juan José Alonso, y el alcalde de Sorbas, Juan Francisco González, acompañados por vecinos y visitantes que han querido ser parte de este día especial.
“Este evento es un homenaje a nuestra historia y nuestras raíces. Es mucho más que una fiesta: es la impresión viva de nuestra identidad”, ha destacado el alcalde, que ha agradecido el esfuerzo de todas las personas que han hecho posible la celebración.
Desde la Diputación de Almería han puesto en valor la importancia del Día de las Ollas como una oportunidad para dinamizar el turismo y la economía local. “Esta actividad responde a nuestro objetivo de impulsar iniciativas que difundan la identidad almeriense. Además del componente lúdico, nos ayuda a recordar y valorar nuestro pasado alfarero”, ha afirmado Almudena Morales.
El delegado de Turismo, Cultura y Deporte, Juan José Alonso, ha subrayado la relevancia de la alfarería en Sorbas como una de sus grandes señas de identidad. “Gracias a eventos como este, costumbres tan nuestras como la elaboración de ollas de barro y la cocina tradicional siguen vivas”, ha afirmado.
La jornada ha demostrado que el Día de las Ollas es mucho más que una cita en el calendario. Es la reafirmación de un pueblo que apuesta por su historia, por sus tradiciones y por la convivencia a través de una festividad única. La lluvia pudo posponerlo, pero Sorbas ha vuelto a lanzar sus ollas con más fuerza que nunca.