“Perceval, Capuleto, Luis Cañadas, Alcaraz, Cantón Checa, López Díaz y Miguel Rueda”. En la segunda planta del Museo de Arte Doña Pakyta un coro de voces infantiles enumera los nombres de los integrantes del Movimiento Indaliano rodeados por un conjunto de pinturas de este grupo que puso Almería en el mapa del arte a finales de los años 40 del siglo XX.

Son solo unos niños, pero ya saben que los indalianos se caracterizan por pintar con colores muy alegres, que en sus cuadros la luz es un elemento predominante y que el barrio de La Chanca es uno de sus temas favoritos. Y eso es más de lo que puede decir la inmensa mayoría.

Un grupo de alumnos del CEIP Colonia Araceli de la capital recorrió ayer la pinacoteca de la plaza Circular tras trabajar en clase los dos nuevos cuadernos didácticos que acaba de editar el Ayuntamiento de Almería para complementar la visita guiada al Museo Doña Pakyta dentro de sus programas educativos. Dos publicaciones que permiten a los maestros trabajar el material en clase, como anticipo a la visita, con el propósito de acercar el arte almeriense a los alumnos de Primaria.

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Con textos y propuestas didácticas realizadas por el director del Museo Doña Pakyta, Juan Manuel Martín Robles, se han elaborado dos ediciones distintas para realizar dos visitas diferentes, a elegir por cada centro educativo que visite el museo: ‘Un paseo por el arte almeriense en el Museo de Arte Doña Pakyta’ y ‘Pintores indalianos en el Museo de Arte Doña Pakyta’.

En el primero se explica brevemente la historia de la casa, cómo se convirtió en museo, y qué es un museo. Se realiza un repaso por el arte del retrato en el siglo XIX a través de las obras de las primeras salas, se explica qué es un bodegón; cómo en el siglo XX algunos pintores almerienses se dedicaron a este género de la pintura, destacando las obras de Gómez Abad y Moncada Calvache. Se dedica una mención especial a dos de los artistas almerienses más internacionales: Federico Castellón y Ginés Parra y finaliza con una breve mención al Movimiento Indaliano y al símbolo del indalo.

El segundo cuaderno comienza con los inicios de los indalianos en torno a las tertulias de la cafetería La Granja Balear. La publicación continúa deteniéndose en los pintores que formaron el grupo original, sus influencias, su primera exposición en el Museo Nacional de Arte Moderno de Madrid y al Salón de los Once, en el que volvieron a exponer de la mano de Eugenio D’Ors. También incluye una mención especial a la figura del indalo y su origen.
Completan las publicaciones sopas de letras, ejercicios para encontrar las diferencias y propuestas para colorear y dibujar.