La Voz de Almeria

UD Almería

Almería: llega la borrasca Rubi

El entrenador sigue apostando por el ascenso directo a Primera División

El entrenador del Almería no se baja del burro y habla de ascenso directo.

El entrenador del Almería no se baja del burro y habla de ascenso directo.Laliga

Tony Fernández
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LA OPINIÓN DEL PARTIDO: Tiene libertad para decir lo que quiera, y lo hace, después de una derrota durísima en un buen partido del Almería. Llegué a anunciar la victoria cuando llegó el empate porque el Granada estaba sometido y pedí a gritos la llegada de los cambios. Me equivoqué. Olvidé que se hacen durante la semana y no en función del desarrollo del encuentro. Craso error. Atentos que el técnico asegura que su equipo va a luchar por el ascenso directo y no habla de una forma de defender que da pena y arruina los partidos y todo su trabajo semanal. Son 34 jornadas saliendo como el que sale a tirar la basura y no hay manera de acabar con la portería a cero en esos días que el entrenador cataloga como partidos "bestia" donde se ganan las Ligas, y se pierden. Mal en los cambios y bien su equipo hasta que concedía el segundo del Granada y se bajaron las persianas.

Perdió hasta el golaveraje particular en un partido donde lo mejor fue una vez la afición a la que está mandando a casa este Almería. Porque no toda la culpa la tiene el entrenador. Los futbolistas se desconectan en los partidos y la hacen sonora. Esos que estuvieron 14 sin perder ahora presentan números de colista y su míster ni abre la boca por no molestar. Lázaro sigue siendo uno de los cambios y lo juega todo dentro del plan de adaptarlo al equipo, el tren de Primera se le va y no se enteran.

Van 34 jornadas sin mejorar en la estrategia. Son 34 jornadas saliendo al campo a verlas venir y sin autocrítica alguna sobre la gestión cuando se puede mirar en el espejo del Real Oviedo que por menos que él lo ponían en la calle a Javi Calleja estando en plaza de Play Off a las que ahora no llega Rubi.

34 jornadas

Ya los aficionados que se desplazan y los que se quedan en casa tienen claro que el Almería encajará un gol. Pasó en Granada y la sensación era buena porque estaba jugando bien y firmaba uno de los mejores partidos fuera de 2025 del que solo se salva el triunfo en Córdoba. Lo malo de esto es que los seguidores se siguen preguntando qué hace el entrenador para evitar que su equipo entre dormido. Si se habla de un partido "bestia" hay que salir a jugar a la selva y no como un gatito paseando por el campo hasta que te dan la primera galleta. No aprenden los futbolistas o no es capaz de corregir el entrenador. Ustedes elijan una de ellas que las dos valen. A falta de 8 jornadas el equipo no va a cambiar.

Cambios tarde

Para no hablar de la pizarra que parece que se ha perdido en el vestuario del Almería, vamos a los cambios. Si Rubi planifica un partido durante la semana debe tener claro que hay un rival que también juega y utiliza las mismas armas. No cambia, siempre llega tarde y aunque Baptistao esté reventado en el campo lo mantiene porque hay que llegar como mínimo al minuto 60. Cambios que más de una vez han llegado cuando el partido estaba perdido y luego en la sala de prensa nadie habla de ello. Él es el entrenador, tiene firmados tres años pero la gente ve los partidos y está decepcionada. La están aburriendo.

Autocrítica cero

Rubi ha visto cómo las barbas de Javi Calleja eran cortadas por cuatro partidos y un solo empate con el Oviedo en plaza de Play Off. No esperen autocrítica feroz que tras ganar al Levante hablaba de la importancia de los puntos y aparcaba el juego, y tras perder en Granada hablaba del juego y menos del resultado. Tiene un manejo en la gestión y la exposición en su fútbol que le da tiempo de felicitar a Gonzalo Villar por su gol al Almería. Este es el técnico que hay y es verdad que la plantilla es mala porque no dio la talla en Primera ni rinde en Segunda. Pero si Rubi anuncia que su equipo va a pelear por el ascenso directo a Primera ya le pueden poner nombre a la borrasca, que está de moda.

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