Lo dijo un sabio del fútbol como, Esteban Andrés, siendo portero del Almería. A raíz de un gol que les entró en la recta final del partido y les costaba el triunfo. El mismo que nos enseñó aquello de: “tanto dulce pica diente”, nos dejaba otra frase para la historia con la flecha que marca el rumbo de los equipos y “si la flecha mira hacia arriba esto tiene que acabar bien”, decía como uno de los sabios del balompié.

Esto es justo lo que le está pasando al Almería de José Gomes, y lo pudo comprobar en sus carnes contra el líder Real Mallorca que le derrotó en la última jugada del partido, y solo una semana después un colista como el Zaragoza, la tuvo mejor y no llegó el Toro Fernández ni a contactar con el balón.

La flecha marca tendencias y ahora el Almería la tiene apuntando a Primera División y le sale todo hasta en un partido malo como el vivido frente al Málaga, aguantando el chaparrón de un mayor control del rival para esperar un momento que solo llega cuando lo dice la manida flecha.

Muchos pensarán que esto de la flecha es un camelo, pero si le ponemos racha suena más futbolístico, y no deja de ser lo mismo porque a la larga de lo que se trata es de ganar partidos y es más fácil cuando todo se te pone de cara, con independencia de los merecimientos del rival. José Gomes sabe que esto de la flecha funciona en un fútbol cargado de manías y supersticiones.

Tengo claro que estamos con la flecha apuntando a Primera División en una temporada donde están muy caras las dos primeras posiciones con dos equipos que rozan la perfección como Real Malorca y Espanyol. Van sobrados por una Segunda que han sabido asumir con humildad y les basta con la calidad para hacer buenos los pronósticos.

El Almería es ahora el tercero de la fila y se puede colocar segundo y regalarnos una Navidad de Primera, ganando en Cornellá El Prat. Va a ser el partido más complicado de lo que va de temporada, pero si hay un equipo a día de hoy capaz de vencer al Espanyol ese es el Almería de José Gomes que jugará con la flecha apuntando al cielo de Barcelona.