El mejor Día de Reyes para el Almería. La victoria frente al Mallorca coloca noveno de la fila, con 28 puntos, a los rojiblancos. Fran Fernández tenía en la grada a toda su familia y a la conclusión del choque, sus dos hijas bajaron al terreno de juego para hacerse una foto para el recuerdo. Ya más tranquilo, en sala de prensa, el técnico apuntó que era una jornada para que la afición se lo pasara en grande con los futbolistas, y no perdonaron: “Nosotros disfrutamos menos, pero uno de nuestros objetivos es que la gente se lo pase bien y ha sido un partido para ello, para disfrutarlo”.

Balance

Salió más enchufado el Mallorca, que pudo adelantarse en un mano a mano de Merveil con René. Sin embargo, conforme avanzaba el duelo las pérdidas rojillas se acumulaban y ahí aparecía la velocidad local. Fruto de la presión llegó el penalti a Álvaro Giménez, que acabó en gol. “La primera mitad fue igualada, porque delante había un gran equipo, pero controlamos el juego. En la segunda mitad hubo espacios y pudimos conseguir un resultado mayor”, señaló Fran.

Penaltis

Fallaron dos penas máximas de tres lanzamientos. Álvaro Giménez acertó en el primero, y perdonó en el segundo, lo mismo que Sergio Aguza: “Si hay que ponerle un pero al partido es la falta de agresividad y determinación en los metros finales, aunque estoy satisfecho con la labor del equipo, que no da un balón por perdido”.

Fue uno de los encuentros más completos de la temporada para el cuadro almeriense en el Mediterráneo: “El Mallorca jugaba más directo y necesitábamos tapar pasillos interiores para salir a la contra. El partido fue bastante completo”. Sin dejarse llevar por la euforia, Fran recordó que, “si queríamos ser ambiciosos, era el día para hacerlo y lo conseguimos”.