"Al hacerse curas, algunos se crecen y al final se hacen unos desgraciaos"

Antonio Navarro Vicente en su primera misa como párroco en la Iglesia San José de Los Gallardos.
En la Catedral de Almería se ordenó sacerdote el gallardero Antonio Jesús Navarro, junto a otros dos jóvenes seminaristas de la diócesis.
Le acompañaron Juan Antonio Pérez de Félix y Jesús Manuel Rodes Cano, natural de Antas. La catedral resultó pequeña para acoger a todos los presentes: sacerdotes diocesanos, venidos de otras diócesis, religiosas, familiares, y fieles procedentes de las parroquias en las que están destinados, así como de sus pueblos natales. Sus nombres pasarán a la historia de la Diócesis de Almería, pues no se vivía una ordenación triple desde 2016.
Si la catedral quedó pequeña, el domingo, 30 de noviembre, la Iglesia-Parroquial de San José de Los Gallardos quedó repleta de paisanos, personas venidas especialmente de Turre y Vera, los alcaldes de Bédar y Los Gallardos, Ángel Collado y Francisco Reyes que intervino al final para felicitar en nombre del municipio a Antonio Jesús. También asistieron exalcaldes como la gallardera María González y Félix Mariano López de Vera. Todos, no quisimos perdernos un día tan importante como fue asistir a la primera misa de nuestro vecino Antonio Jesús Navarro Vicente (Los Gallardos, 1999), hijo de albañil y de dependienta. El desarrollo religioso fue muy emotivo que impresionó por la organización y las voces en los cánticos religiosos. “Yo quise celebrar”, destacó Navarro a este periodista, “la misa propia de Cristo Rey por resaltar el reinado universal de Cristo, reino de verdad y vida, santidad y gracia, de justicia, amor y paz”. Desde el lunes pasado, sin descanso, ejerce de vicario parroquial del Arciprestazgo de Vera, Palomares, Antas, Lubrín y Uleila del Campo. El viernes pasado, Navarro Vicente nos confesó su línea de trabajo en el que atiende la realidad de la población migratoria que se ha asentado en la zona como impulso para la atención a mayores, enfermos y el papel determinante en la agricultura de casi toda la provincia. Se quiere combatir la soledad que no cuida la inteligencia artificial, ni el algoritmo. Se necesita inteligencia emocional y como señala mi admirada periodista Luz Sánchez-Mellado “Jesucristo fue crucificado con un ladrón a izquierdas y otro a derechas, que corruptos hay en ambos bandos”. La frase que le gusta utilizar al nuevo sacerdote gallardero para resumir su labor es: “Mostrar el amor de Dios al mundo, a todo ser humano”. El actual Cura-Párroco de Los Gallardos, Víctor Manuel Fernández, tomó la palabra para animar al nuevo sacerdote, en una tarde grande para los creyentes con las campanas a pleno rendimiento, tal como ocurrió con Esteban Belmonte Pérez, el primer sacerdote nacido en Los Gallardos, exrector del Seminario, exsacerdote de poblaciones importantes como Vera, o durante mucho tiempo en San Pedro de Almería.

Francisco Alarcón, Antonio Narro y A.Torres en la sacristía de Los Gallardos.
Antonio Jesús Navarro desde sus primeros estudios en el Seminario ya portaba su sotana negra con orgullo. Desde que era un niño comenzó a acercarse a la parroquia con el fin de ayudar en lo que podía hasta que puso sus ilusiones y sueños de ser religioso en la figura del sacerdote Francisco Alarcón Alarcón (Albanchez, 1934), tío de la actual concejala, Esther González Alarcón, docente en la Universidad de Almería y que coordinó Los Gallardos. Mucho más que cien años de historia donde aparece un trabajo de ambos curas sobre la creación de la Parroquia de Los Gallardos con la génesis del obispo Santos Zárate que llegó a Almería a finales del siglo XIX. El curtido sacerdote Alarcón cantó su primera misa hace 64 años. Arrancó aplausos por su tono jocoso y de sabio al referirse a su relación con Antonio Jesús durante la misa. “La gente pensará que este cura viejo lo ha engañado. Yo nunca me acerqué a ti. ¿Verdad o mentira? No te dije ni que fueras cura cuando te conocí. Tenías 14 o 15 años. No te llamé, no te engañé, no te dije nada. Te acercabas por la plaza con tu bicicleta. Me hacías preguntas de persona mayor sobre la fe, la marcha de la Iglesia y la alegría con la que te interesabas. Al final, me di cuenta de que fuiste tu quien me engañó. Y él insistiendo que quería ser cura. Le dije: ve a la oración y pregúntaselo al Señor que será quien te llamará. A los pocos días, me informó que el Señor le dijo sí…El evangelio de hoy no es solo para los curas, sino para todos ustedes, para cristianos y no cristianos porque al final nos preguntarán si hemos tratado bien o mal al prójimo. A los fieles tienes que tratarlos bien con amabilidad porque hay algunos que al hacerse curas se crecen y al final se hacen unos desgraciaos que se creen los amos del mundo cuando suben. Y no son nada”. Antonio Jesús Navarro reiteró: “Alarcón es mi modelo sacerdotal y el que me ha guiado desde niño para afrontar con alegría, en acción de gracias y también con cierto respeto”. Es consciente de la exigencia del ministerio: “Lo vivo siendo consciente de la grandeza del sacerdocio y de lo que espera la Iglesia de mí. Estoy contento, y confío que el Señor me ayudará a llevar a cabo todo lo que Él me pida”. Le tocará combatir bulos de La sociedad del vacío, teoría del filósofo Lipovetsky sobre la era posmoderna, caracterizada por el individualismo. El sacerdote Francisco Alarcón, autor de una decena de libros con títulos como La juventud exige cambio. Se licenció en filosofía y en Teología dogmática en la Universidad de Comillas, y en Filosofía y letras en la Complutense. Nieto de Francisco Alarcón, el tío Molinero, que impulsó una de las primeras fábricas de harina de la provincia en Los Gallardos, hace un siglo. La maquinaria y edificio son patrimonio local.
El veterano Alarcón me propició en tiempos de estudiante colaborar con la revista Tierras del Sur que dirigió José María Javierri. Era 1977 y mi reportaje fue sobre la Asociación Naturista de Andalucía, y la primera playa naturista de Vera. Y la foto mítica de la película Novecento, una epopeya sobre la lucha de clases en portada. Javierre, el amigo de Alarcón, fue director, durante los últimos años de la dictadura franquista, de El Correo de Andalucía, La sonrisa seductora de la Iglesia, título de una biografía escrita por Antonio Lorca. Esa sonrisa se la percibí en la portada y por sus apariciones en TVE y en Canal Sur.