La noche del lunes dejó una de las entrevistas más tensas que se recuerdan en Viajando con Chester, el programa presentado por Risto Mejide en Cuatro. El publicista catalán recibió a la cantaora granadina Estrella Morente, y lo que parecía un encuentro sereno acabó convertido en un encendido intercambio de posturas. La causa: la tauromaquia, un tema que no deja indiferente a nadie y que en Andalucía, especialmente en provincias como Almería, cuenta con una larga tradición cultural y social.

Estrella Morente, hija del inolvidable Enrique Morente y casada con el torero Javier Conde, no ha ocultado nunca su vínculo con el mundo del toreo. Durante la charla, explicó que nunca ha votado a un partido político concreto, apostando por el voto en blanco. Según sus palabras, no se siente representada por ninguna formación.

Aprovechando esa declaración, Risto planteó una pregunta directa: si votaría a un partido que defendiera la tauromaquia. Estrella lo tuvo claro: “Soy una enamorada del animal en el campo”. Y añadió con firmeza: “A mí me emociona una maravilla de faena, me gusta el toro, el toreo”.

El tono fue subiendo rápidamente cuando Risto respondió: “Con todo el respeto, no entiendo a los taurinos, no entiendo qué parte de torturar a un animal os emociona”. Morente, sin dudar, defendió su posición: “Yo te lo respeto, tampoco entiendo por qué hay gente que pasa hambre en este país”.

La tensión escaló aún más cuando la artista calificó a Mejide de “ignorante”. “Eso se llama ignorancia, es falta de información. La ignorancia muchas veces nos atrofia, nos limita”. Risto, molesto, replicó: “Con eso me estás faltando al respeto”.

Finalmente, Estrella intentó rebajar la tensión, sin ceder en sus convicciones: “Te pido disculpas. Tú, como publicista, tienes un conocimiento que yo desconozco y soy ignorante. Por cómo me estás hablando, desconoces la tauromaquia... Si quieres, me traes otro día”.

Pero Risto concluyó con dureza: “Todos los taurinos con los que he hablado se defienden con los mismos argumentos, que son falacias, mentiras... ¿Sabes cuántas cabezas de bovino hay en el mundo? ¿Sabes qué porcentaje es de toros? Igual no soy tan ignorante”.

Una conversación que, sin duda, ha dado que hablar en redes sociales y que vuelve a poner sobre la mesa un debate social profundamente polarizado, especialmente en tierras andaluzas como la nuestra, donde la tradición y la sensibilidad animal conviven a menudo en tensión.