Unas tinajas de vino, cedidas por la familia de Manuel López, presiden ya la nueva rotonda de acceso a la ciudad por la carretera de La Alquería. Es el tributo que el municipio rinde a su tradición vitivinícola y el final de un proyecto que ha terminado con uno de los puntos negros del tráfico. Terminadas las obras por parte de la Diputación de Almería, el Ayuntamiento se encarga de su embellecimiento.

Varios olivos centenarios forman parte también de la decoración elegida por el equipo de Carmen Crespo, alcaldesa de la localidad. La colocación de césped y la instalación de la iluminación correspondiente centrarán en los próximos días los últimos trabajos de un proyecto solicitado por vecinos y Ayuntamiento desde el año 2004. El volumen de tráfico que soporta esta vía de acceso a Adra así como la falta de visibilidad en el cruce con Camino de Belén obligaron a sustituir la anterior arqueta por una rotonda para la distribución del tráfico rodado.

Según ha informado el Ayuntamiento de Adra, las tinajas que hoy decoran esta glorieta se han utilizado tradicionalmente para almacenar el vino. Han pertenecido a la familia de Manuel López y han sido recuperadas y puestas en valor para presidir uno de los accesos a Adra por la A-7.