El martes de ‘No-Feria’ volvió a llenar anoche el Recinto Ferial de La Vega de Acá. Grupos de familias y jóvenes no quisieron perderse esta vuelta ‘atípica’ a la feria. Este año, aunque no hay ambigús, ni casetas, ni batallas de flores, sí que están las atracciones, además de los puestos de comida y habilidad.

La dueña de ‘Vinos Montroy Jiménez’, Mari Manzón, contó para LA VOZ cómo ha sido la vuelta a la feria después de más de un año y medio: “Muy duro, pero con alegría. Lo hemos pasado muy mal y ya teníamos necesidad”. La responsable de este establecimiento pidió también a las instituciones que “no se olviden de los feriantes”.

A pesar de que la afluencia de gente en el Ferial no es tanta como hace dos años, antes de la pandemia, hay un gran ambiente al pasear por los alrededores de la explanada donde se encuentran instaladas las atracciones.

“Los niños tenían muchas ganas de ir a la feria y, aunque no sea igual que en otros tiempos, hay que venir para apoyar a los feriantes y a todos los que viven de este mundo, eso sí, cumpliendo con las medidas de seguridad, que es lo que toca ahora. Hay que ser responsables”, comentó una madre que subió con sus  dos hijos. Divertirse está bien, pero hay que ser responsables, y esto los almerienses lo saben.