Según el concejal de la piqueta municipal somos simpáticos
Según el concejal de la piqueta municipal somos simpáticos
Manifiesta don Pablo Venzal, diligente edil de la piqueta municipal que está derribando el Toblerone, que los que estamos en contra de ese derribo somos “gente simpática” pero que estamos mal informados.
Estarán con uno en que don Pablo es concejal porque tiene que haber de todo en el ayuntamiento. Y no me parece que sea un antipático por dar la orden de que caiga el silo del mineral. Puedo pensar otras muchas cosas de él, y las pienso, pero lo de antipático o simpático no veo que tenga nada que ver ante la situación.
Somos gente simpática los que queremos que no se derribe, pero le estamos dando la barrila al edil de urbanismo, con lo feliz que se las prometía, le estamos fastidiando el comienzo del verano y agriando el tinto de verano.
Está sufriendo el pobre lo que no nos podemos ni imaginar. Y si se confirma que el documento de cesión de los terrenos en su día guarda letra pequeña sobre lo que hay que hacer con los terrenos una vez desaparecida la gestión empresarial, y que podría aparecer ante el movidón organizado por los ciudadanos, apañado y quemado puede acabar (y no sabemos si bien o mal informado) el señor Venzal, antipático concejal según sus propias palabras. Si los que estamos a favor de que se mantenga el armatoste somos los simpáticos, los que lo quieren derribar deben ser los antipáticos, ¿no, don Pablo?
El edil ha conseguido dividirnos entre simpáticos y antipáticos. En esta ocasión me ha tocado ser de los buenos, los simpáticos.
No sé lo que pensarán mis colegas, compañeros y amigos, Antonio Felipe y Pepe Fernández, de que a ellos les haya tocado estar en el lado de los antipáticos. Conociendo al edil, sabiendo de su talante, está que fuma en pipa india y no echa humo.
Entiéndase: Tiene don Pablo un cabreo tan morrocotudo contra la plataforma y los que a ella nos hemos subido que no se lo salta un torero. Le estamos chafando su gran faena del verano. Él, que quería ver al final del estío hecho un solar el Toblerone, anda con la mosca tras la oreja. Mira que tiene mala baba esta gente tan simpática y tan mal informada, ¿verdad don Pablo? No sé si va a conseguir el derribo del inmueble, pero parece va a ser sufrido.