La Voz de Almeria

Opinión

Publicado por

Creado:

Actualizado:

No deja de ser paradójico que el único gran partido nacional que hace alguna referencia a España en su nombre, el Partido Socialista Obrero Español, sea el que más problemas tenga a la hora de situarse respecto a ese proyecto común que se llama España. Baste recordar ahora las estupefacientes disquisiciones perpetradas por  Zapatero cuando decía eso de que “España es un concepto discutido y discutible”, o las no menos alucinantes idas y venidas del actual Secretario General, Pedro Sánchez, sobre lo mismo.
Pero no vayamos tan alto. Fijémonos en el síncope sufrido por el Grupo Municipal Socialista de Almería al enterarse de que el Ayuntamiento iba a regalar banderas de España para conmemorar vistosamente el día de la Fiesta Nacional, 12 de Octubre. En cuanto se hizo público, los socialistas entraron en su habitual bucle demagógico, desplegando el conocido abanico de lugares comunes: que si hay barrios con necesidades, que si no es la prioridad, que si vaya gasto inútil, etcétera. Festival que no protagonizan, por ejemplo, cuando lo que se regalan son pascueros navideños. En todo caso, una postura que contrasta poderosamente con la de sus compañeros en Madrid, que han apoyado sin problemas la colocación de banderas españolas en las farolas y el regalo de ejemplares de la Constitución pagados por el Ayuntamiento.
Y eso se explica con ese manual de embestida de salir siempre en contra de todo –sea lo que sea- lo que haga el equipo de Gobierno y en ese error -del que no consiguen recuperarse- del complejo de ceder el uso de los símbolos de todos al PP. Mientras en el PSOE almeriense sigan demostrando que la bandera de España les provoca reacciones alérgicas y que con la que de verdad se sienten cómodos es con la de la II República, seguirán por muchos años emitiendo notas de prensa desde los despachos de la oposición.


tracking