Si algo te importa, no lo exijas a otro y hazlo tú. Ahora que ha pasado un poco el fervorín conmemorativo del bombardeo naval alemán sobre Almería, en 1937, aprovecho para compartir con ustedes una reflexión que quizás resulte de su interés. Ya sé que esto que escribo será motivo de malestar y reconvención por parte de quienes, además de establecer por decreto los tiempos, las formas y los calendarios, se encuentran además en la posición moral de poder señalar lo que es o no es memorable y, sobre todo, lo que es conveniente o inconveniente. Por eso, y cuando más coreografiado es el empeño del PSOE por recordar y dolerse y patrimonializar ese hecho concreto de la historia común, quizás haya alguien que, como yo, se pregunte por las razones que impidieron a los socialistas rehabilitar la memoria física e histórica de aquellos terribles hechos en los muchísimos años que gobernaron el Ayuntamiento. Llama la atención la insistencia del PSOE en reclamar del actual equipo de Gobierno Municipal una serie de medidas que, dado el ardor y la vehemencia con la que ahora las exigen, extraña que no fueran adoptadas por ellas y ellos nada más iniciar la prolongada etapa de gobiernos socialistas en el Ayuntamiento, que hasta ahora suman veinte años. Llámenme loco, pero la lógica señala que, de haber tenido el PSOE un interés real por el asunto, sin duda se habrían ocupado por rehabilitar los refugios y colocar en ellos “o en un lugar más visible”, como exigen ahora, placas conmemorativas con el nombre las víctimas, o lo que ellas y ellos hubieran estimado oportuno u oportuna. Pero las prioridades de la gestión socialista deberían estar en otros afanes durante esas dos décadas, porque jamás hicieron nada al respecto. Y ahora, cuando terminen de ponerme a parir, a ver si alguien puede responder a esta sencilla pregunta: ¿por qué tanto interés ahora y tan poco antes?