El mundo está mejor de lo que crees

Es un hecho que una mayoría de ciudadanos considera que el futuro es negro zaíno, pero la realidad del planeta es muy diferente a lo que se viene creyendo. Así lo contaba el ya desaparecido médico Hans Rosling en varias charlas TED y en su libro Factfullness, de obligada lectura. 

Los datos que expone en su obra arrojan verdades catedralicias. La esperanza de vida ha aumentado a nivel global, la pobreza extrema se ha reducido a la mitad, la vacunación y la educación son generalizadas y la mortalidad infantil se encuentra en sus números más bajos de la Historia. Son hechos que desmienten categóricamente que el planeta vaya a peor, como así quieren sugerirnos las noticias a diario.

Rosling nos demuestra, por ejemplo, que desde el año 1800 hasta hoy el progreso de la humanidad ha sido vertiginoso, y que desde no hace tanto tiempo (60 años) este ascenso ha sido todavía más meteórico. No ya sólo en los países pobres sino también en los ricos. Corea del Sur, actualmente la novena potencia mundial, tenía una renta per cápita como la de Etiopía hace pocas décadas. Igual sucedía en la próspera Suecia, sumida en gran parte de su territorio en la miseria hace unas pocas decenas de años. Sorprendente, ¿verdad?

El pesimismo ha envenenado a los jóvenes hasta el punto de que muchos han decidido no tener hijos para no “contribuir a un planeta insostenible”. Alucinante. Como dice Rosling, no podemos negar el cambio climático, pero igual que hemos avanzado en tantos indicadores podremos reducir la contaminación con voluntad y talento. Tenemos el ejemplo de la recuperación de la capa de ozono o de animales en peligro de extinción, como el rinoceronte negro. En definitiva, no debemos perder un minuto con tanto alarmismo para buscar, en cambio, la forma de mejorar nuestras vidas y la salud del planeta, como se ha conseguido gracias fundamentalmente al capitalismo, atacado por la izquierda de nuevo cuño. Y por cierto: las noticias no son la referencia de lo que ocurre en el mundo. No se las tomen a la tremenda.