Burgos 0-2 Almería: Más cerca de la gloria

Máster de la UD Almería en El Plantío. Superioridad rojiblanca y victoria que acerca un poco más la gloria deportiva a los almerienses, que escalan a los 73 puntos y traspasan toda la presión al Real Valladolid, ahora cuatro por detrás.

Esta vez no hizo falta sufrir ni vivir al límite del infarto con el equipo porque el claro dominador fue el conjunto de Rubi. Eso sí, el fútbol no le va a poner fácil el ascenso a la plantilla y los primeros minutos fueron de empuje y garra, obligando a Fernando a intervenir en un mano a mano con Ernesto. Mantener el tipo, recuperar el balón, las sensaciones, y dar el picotazo al duelo. Ese era el plan, y salió perfecto.

Calidad
La sangre fría y la templanza con la que el Almería saltó a El Plantío invitan al optimismo, independientemente del resultado, porque los profesionales no se dejaron llevar por la clasificación y por la cercanía de un billete a Primera División. El Burgos sabía que en cualquier momento le podía caer un sartenazo y defendió con muchas dudas.

Los partidos se deciden en las áreas y en la primera llegada Umar Sadiq entrega a Lucas Robertone, que bate por bajo a Alfonso Herrero. Hasta ese minuto, el 17, el Almería había logrado trabajar y no dar vida a su rival.

La única vía de agua era el balón parado, con el Burgos rematando y acabando todas las acciones. Camino del descanso otra bomba almeriense. Córner botado por Robertone que Grego Sierra manda a la red sin querer. Sin grandes alardes ni hacer nada extraordinario, dos goles de ventaja y duelo controlado en El Plantío, donde nadie había logrado una ventaja tan amplia en el luminoso. La mitad de la faena ya estaba hecha.

Control
En la segunda mitad pasó lo que quiso el Almería, aunque no definió bien las transiciones y dejó con un último hilo de esperanza al Burgos. Camino del 90 penalti de Sousa a Rubio que Fernando detiene a Valcarce; primero la pena máxima y luego en el rechace, pero a un precio alto porque el murciano se dolía mucho de la rodilla izquierda. “¡Acabo como sea!”, dijo al cuerpo médico y a sus compañeros de equipo.

Resultado de 0-2, manejo tremendo de los tiempos del partido y la sensación de que el Almería pudo incluso darse un festín de goles en el tramo final. En este último empujón de la temporada las finales se ganan y la de Burgos se presentaba como la más difícil por la entidad del rival y su trayectoria como local. Hay un portero que para cuando tiene que parar, un ataque que sabe vivir sin los goles de Sadiq, un control de la situación excelso y lo más importante; los puntos y la sensación de que este año no se puede escapar la vía de Primera.

Flecha
Aferrado a la segunda plaza y la ciudad ilusionada, el Almería dio otro saltito hacia la gloria deportiva en Burgos. Este duelo se empezó a ganar con el gol de Curro Sánchez el lunes frente al Sporting, porque fue el momento donde la comunión y el empuje de una sociedad llegaba al corazón y a la clasificación. Es el momento, es el año. Almería ha hablado en la grada y también en el campo. El sábado en el Mediterráneo oportunidad para pegar otro bocado al objetivo con previsión de lleno total. La ilusión se ha desbordado y con motivos.

FICHA TÉCNICA

BURGOS Alfonso Herrero, Navarro (Alarcón, 70’), Miguel Rubio, Grego Sierra, Matos (Alegría, 90’), Elgezábal, Andy Rodríguez, Mumo (Saúl Berjón, 60’), Valcarce, Ernesto (Álvaro, 70’), y Malbasic (Guillermo, 60’).

UD ALMERÍA Fernando, Centelles, Babic, Ely, Pozo, Eguaras (Arnau, 84’), Samú Costa, Lucas Robertone (De la Hoz, 75’), Appiah (Curro Sánchez, 56’), Ramazani (Lazo, 75’), y Umar Sadiq (Dyego Sousa, 84’).

GOLES 0-1, min 17: Lucas Robertone. 0-2, min 44: Grego (pp).

ÁRBITRO Pulido Santana.