Buscan cien empleados para poder abrir el antiguo Hotel Zafiro de Roquetas en julio

El objetivo de la cadena catalana Ohtels, la nueva propietaria del antiguo Hotel Zafiro de Roquetas de Mar es abrir las puertas el 1 de julio. De hecho la compañía con sede en Salou ya está cogiendo reservas para esa fecha. Por ello, ha abierto una bolsa de contratación para un centenar de empleados, entre ellos, cocineros, pinches, camareras de piso, personal de recepción o botones.

Durante estos días 150 operarios -albañiles, fontaneros y electricistas- trabajan a marchas forzadas, en turnos de día y noche para cumplir el plazo de apertura. Asó lo ha asegurado a este periódico el director general de la cadena, Giovanni Cavalli, “tenemos que conseguirlo, para nosotros es importante contar con este hotel abierto en el plazo de un  mes”. Añade Cavalli que “en principio parte como un tres estrellas de 247 habitaciones, pero para la campaña que viene pretendemos convertirlo en un cuatro estrellas”.

El nuevo nombre del Hotel que sustituirá al de Zafiro, será el de Ohtels Roquetas y funcionaria con una oferta de ‘todo incluido”.

 A punto de sucumbir El hotel estuvo a punto de ser convertido en pedruscos, puesto que el Ayuntamiento había intentado subastarlo sin éxito y había dispuesto ya una partida de 500.000 euros para tirarlo abajo. Ahora, con la adquisición por parte de Ohtels, la estructura del edificio será conservada con una rehabilitación integral tras una década cerrado a cal y canto.

 Coste global
El coste global de adquisición y reformas para los nuevos propietarios ha sido de 11 millones de euros. La cadena hotelera nació en 1987 con un proyecto familiar en Salou (Tarragona) y se ha expandido hacia Andalucía. Cuenta actualmente con 14 centros (siete en propiedad y siete en gestión). Desde 2013, su oferta hotelera ha pasado de 2006 habitaciones a las 3.217 actuales. Cuando el 1 de julio abra sus puertas el que se ha denominado Ohtels Roquetas, la compañía contará con un moderno establecimiento de tres estrellas y 270 habitaciones, que entre sus servicios estará dotado de restaurante, bar, piscina y local de animación.

Volverá así a la vida uno de los hoteles más antiguos y queridos del municipio roquetero, situado en un lugar estratégico, en plena Avenida del Mediterráneo y cuyo mal estado ha sido objeto de polémicas en los últimos años por la mala imagen que daba de la principal zona turística de Roquetas.

En estos años de cierre, el edificio, que llegó a estar ocupado ilegalmente por okupas y por personas sin techo y sin recursos.