Vuelco histórico en Andalucía: el PP llega a la mayoría absoluta

El PSOE de Espadas baja, Vox ‘pincha’ en sus expectativas y Cs desaparece

Juanma Moreno, este domingo votando en su colegio electoral
Juanma Moreno, este domingo votando en su colegio electoral La Voz
Antonia Sánchez Villanueva
21:48 • 19 jun. 2022 / actualizado a las 21:51 • 19 jun. 2022

Al final, el que ha sido el gran asunto de debates, dimes y diretes de la campaña de las elecciones andaluzas, los posibles pactos de gobierno tras el 19-J, se ha diluido como un azucarillo en un café muy caliente. No van a ser en absoluto necesarios. El Partido Popular de Juanma Moreno ha conseguido un resultado electoral histórico en Andalucía, al alcanzar una mayoría absoluta de 58 escaños en el Parlamento y conseguir una victoria contundente en las ocho provincias de la comunidad autónoma más poblada de España. Nunca hasta ahora los populares habían conseguido un triunfo tan arrollador en Andalucía. Nunca hasta este domingo el mapa de Andalucía se había teñido cien por cien de azul PP. Nunca este partido había conseguido imponerse en bastiones socialistas que parecían inexpugnables como Sevilla, Huelva o Jaen. Lo más cercano hasta este domingo habían sido los 50 escaños que en 2012 consiguió Javier Arenas pero que, a la postre, no le permitieron gobernar al componerse una coalición entre PSOE e Izquierda Unida. El triunfo de Juanma Moreno para el Partido Popular, con una inusitada subida de 32 parlamentarios y un millón y medio de votos (el doble de los que obtuvo en las anteriores elecciones), es, por tanto, inapelable y le permitirá gobernar durante los próximos cuatro años sin tener que recurrir a compañeros de viaje. 



Con el 99% del escrutinio ya realizado, el PSOE de Juan Espadas se queda por debajo de los resultados de hace cuatro años, 30 parlamentarios, con lo que no llega ni siquiera a la representación de 33 que consiguió Susana Díaz en 2018, y pierde más de 130.000 votos. Los socialistas, que han vivido los últimos cuatro años fuera de San Telmo pero manteniendo la condición de primera fuerza política en el Parlamento, quedan relegados a ser segundo partido en la comunidad autónoma que durante cuatro décadas ha sido su gran granero de voto. A la postre, el PSOE andaluz ha perdido el liderago en todas las provincias de Andalucía, lo que convierte su resultado de este domingo en especialmente amargo para los de Juan Espadas, que se quedan a mucha distancia del PP en todas las circunscripciones electorales de la comunidad. Su porcentaje de apoyo se ha situado en el 24% en el conjunto de Andalucía, casi cuatro puntos inferior al que consiguió hace cuatro años, de manera que no solo no ha conseguido atraer para su candidatura votos procedentes de otras opciones políticas que han sufrido una gran erosión electoral, como los partidos más a su izquierda o Ciudadanos, sino que sufre su propio desgaste. 



Tampoco ha sido un buen domingo electoral para Vox. La formación de extrema derecha, que se presentaba a estos comiciones autonómicos con unas altísimas expectativas, tantas que aspiraba a entrar en el gobierno y a colocar a su candidata, Macarena Olona, como vicepresidenta, sube solo dos parlamentarios con respecto a los que obtuvo en 2018, se queda con 14 y pincha en sus pretensiones de entrar a formar parte de un gobierno liderado por Juanma Moreno. Con este resultado, los de Santiago Abascal no tendrán ninguna opción de mando en San Telmo. 






Por su parte, Ciudadanos, el partido que ha sido socio del PP en el Ejecutivo andaluz, también pincha, pero, en su caso, lo hace del todo, al no obtener ninguna representación en la cámara autonómica que hasta ahora presidía una parlamentaria de la formación naranja, la almeriense Marta Bosquet. Las candidaturas del todavía vicepresidente Juan Marín no consiguen arañar escaño en ninguna de las ocho provincias. Pierde así los 21 parlamentarios de la última legislatura, de los que se ha beneficiado en 



En el espectro político más a la izquierda del PSOE tampoco ha habido mucho que celebrar este domingo. Las dos opciones que aspiraban a conseguir los apoyos que en 2018 dieron 17 asientos en el Parlamento andaluz a Adelante Andalucía, muy castigadas por sus divisiones internas, han sumado entre ambas bastante menos de la mitad de escaños de 2018.  Por Andalucía, la alianza de seis partidos creada poco antes de las elecciones, se sitúa en 5 parlamentarios, mientras que Adelante Andalucía, el partido de Teresa Rodríguez, obtiene dos. 






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