La Audiencia Provincial de Almería ha condenado a dos años y cuatro meses de prisión a un hombre de 47 años que agredió sexualmente durante una fiesta de una amiga, a quien ató con unas bridas a una silla e introdujo un trapo en la boca para evitar que gritase y pidiese ayuda.
El tribunal le absuelve, no obstante, de los delitos de detención ilegal y lesiones de los que también le acusaba el Ministerio Fiscal ya que considera, respecto al primero, que la ató "para llevar a cabo la conducta sexual" sin "exceder una hora, tras la que pudo escapar", y respecto al segundo, porque "son consecuencia de la agresión y de la violencia desplegada" a consecuencia de la "inmovilización".
La sentencia, a la que ha tenido acceso Europa Press, considera "razonable", no obstante, imponer al procesado la pena por el delito de agresión sexual "cercana al límite máximo de la mitad inferior" teniendo en cuenta "que se amarró a la perjudicada para llevar a cabo la conducta sexual ocasionando a la misma un mayor desasosiego, e imposibilitando defensa alguna".
El tribunal considera probado que, en noviembre de 2019, con motivo de una reunión de amigos en su domicilio, el procesado abordó a su amiga cuando estaba en la cocina "sola", y "aprovechando" tal circunstancia y "sin mediar palabra alguna", procedió a atarla a silla "con unas bridas al tiempo que le introducía un trapo en la boca para evitar que gritara".
Relata que, a continuación, y con claro ánimo de satisfacer sus deseos libidinosos, comenzó a realizarle "tocamientos obscenos por todo su cuerpo tras levantarle la camiseta, llegando a tocarle sus partes íntimas por encima de la ropa y siempre en contra de su voluntad".
Remarca la sentencia que también le decía "de forma intimidatoria ´te tengo así durante una hora, no te niegues, no te niegues´".
La víctima consiguió liberarse "haciendo fuerza" después de que el acusado la dejase sola y pudo "soltar la brida que sujetaba la mano derecha y salir de la vivienda de forma apresurada".
La mujer resultó con lesiones que consistieron en dos hematomas en brazo derecho y dos hematomas en brazo izquierdo y señales de bridas en ambos tobillos para las que precisó una primera asistencia facultativa y de las que tardó en curar siete días de los cuales un día estuvo incapacitada para su ocupaciones habitual.
Al margen de la pena privativa de libertad, el tribunal le impone alejamiento a mas de 500 metros durante cinco años y libertad vigilada por el mismo periodo de tiempo, así como le obliga al pago de una indemnización de 3.275 euros por las lesiones y los daños morales.
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