Un paso al futuro desde el corazón agrícola
La histórica cooperativa La Victoria abandona el centro urbano de La Mojonera tras 57 años
Representantes de la cooperativa La Victoria y autoridades locales durante el acto de inauguración de las nuevas instalaciones en el Cruce de los Palos.
Con 57 años de historia y más de 220 socios, la cooperativa agrícola La Victoria ha dado un paso decisivo: trasladar su sede desde el centro urbano de La Mojonera a una nueva ubicación en el Cruce de los Palos, una zona estratégica de fácil acceso para vehículos pesados y clientes del sector agrícola.
Una nueva sede para un crecimiento imparable
La decisión, largamente meditada, responde a un crecimiento sostenido que ha hecho que la sede original —rodeada de un colegio, el centro de salud y el ayuntamiento— se quedara pequeña y poco operativa. Desde que asumió la actual junta directiva, la cooperativa ha experimentado un aumento del 142 % en su volumen de negocio, lo que hacía urgente contar con unas instalaciones más modernas y funcionales.
“La evolución de la cooperativa exigía un cambio para mejorar nuestro servicio y adaptarnos a los nuevos tiempos”,
La nueva sede ofrece mayor capacidad logística y mejor circulación para los socios y proveedores, en una ubicación natural en la ruta hacia las fincas agrícolas.
Más que un cambio de ubicación: una apuesta por el futuro
Además de los beneficios operativos, esta mudanza simboliza el compromiso de la cooperativa con la innovación, sin perder de vista su esencia. Fundada en 1968 por 16 agricultores, La Victoria ha sido un motor del desarrollo agrícola en la provincia, centralizando compras de insumos, ofreciendo financiación con ventajas exclusivas —como la tarjeta “Agrofuerte La Victoria”— y brindando apoyo técnico a sus socios.
Aunque no se prevé una ampliación inmediata de la plantilla, el notable aumento de socios en los últimos años apunta a una tendencia de expansión constante.
Aliada del agricultor ante nuevos desafíos
En un entorno cada vez más complejo, donde los agricultores enfrentan desafíos como la escasez de agua, el aumento de los costes de producción, las restricciones de la PAC o la amenaza de nuevas plagas como el Thrips parvispinus, el papel de cooperativas como La Victoria resulta clave para la sostenibilidad del sector.
La inauguración de las nuevas instalaciones fue un evento cargado de emoción.
“Vivimos una gran fiesta, con socios, trabajadores y representantes institucionales. El corte de la cinta fue un momento muy especial, lleno de historia y de futuro”.
Con este paso, La Victoria reafirma su papel como referente en la agricultura almeriense: evolucionar sin renunciar a sus raíces, siempre al servicio del campo.