Los aficionados al fútbol en Almería volverán a estar pendientes de Girona. Si el año pasado fue para seguir el trabajo de Francisco Rodríguez y su cuerpo técnico, ahora es el turno del jugador Álex Baena. El atacante ha llegado a Montilivi cedido sin opción de compra por parte del Villarreal y ya ha debutado con su nueva camiseta, en un duelo con Las Palmas que finalizó con empate sin goles. El roquetero fue presentado este miércoles por el director deportivo, Quique Cárcel, y ofreció sus primeras valoraciones: "Mi objetivo es crecer como jugador y persona ayudando en lo posible al Girona, cumpliendo los objetivos individuales y colectivos".

Un nuevo reto

Un Baena que después de brillar en la Europa League con el Villarreal ha dado un paso en su carrera para tener más continuidad de la mano de Míchel: "Las sensaciones son buenas, y en cuanto a la posición me da igual la banda, aunque me siento más cómodo jugando por dentro". Reconoce que tuvo ofertas de otros clubes de la categoría, pero el proyecto del Girona le sedujo: "Había un par de equipos interesados, pero en cuanto hablé con Quique y el míster no me lo pensé dos veces y Girona es una ciudad perfecta para vivir y pelear por un objetivo grande".

Con los mejores

Apunta el joven jugador que bajar una categoría no supone un contratiempo en su carrera deportiva: "No es un paso atrás, porque compañeros que salieron cedidos volvieron y son campeones de Europa. Es un reto personal para regresar siendo mejor futbolista". Sin presión y dispuesto a disfrutar ha aterrizado Álex Baena en el conjunto catalán, donde comparte vestuario con Christian Stuani, uno de los grandes delanteros de la competición: "Aprendes mucho de la Primera División y de tus compañeros. Fui uno más de la plantilla todo el año y eso ayuda en tu proceso de aprendizaje".