He visto los dos partidos de vuelta, de cuartos de la Champions, el Barça – Roma y el Madrid – Juve. Podría encarar el análisis desde varios puntos, pero, como siempre, lo voy a hacer desde el táctico; vamos con el primero:

“…El contrario se presenta bajo un 1-3-4-1-2, trabaja en zonas y actúa realizando pressing en medio campo contrario, para evitar que el rival pueda salir con balón combinado.

Con tu equipo, bajo el sistema que creas conveniente, organiza, desarrolla y dirige, la táctica a emplear para contrarrestarlo y superarlo”

Esta es una de las muchas papeletas de las que se tienen que examinar mis alumnos de segundo y tercer nivel de entrenadores, y les anticipo que lo que dice la papeleta que hace el contario, es que lo hacen bien.

Si te empeñas en querer salir con el balón jugado desde atrás, el tiempo y el buen hacer del contrario te harán caer en tu error, y si no tienes un plan “b”, verás como el equipo se te va desmoronando, el contrario creciendo y el resultado ampliándose en contra.

La solución no puede ser otra que “ataque directo”, pero bien estructurado, no pegando pelotazos. Necesitas montar la línea de rechaces, mandar balón sobre la punta, que la punta los dispute y la línea de rechaces, con ventaja de visión y tiempo, se haga con ellos y realicen la fase de ruptura con acciones, lo más parecidas al contraataque. De no ser así, ¡…lo siento, vuelva en septiembre!

El Madrid, advertido con lo pasado el día anterior, salió con la motivación necesaria y la intensidad suficiente, pero… ay!

El contrario, cada vez que se hacía con el balón, lo tenía fácil: a la espalda de Marcelo, sobre Douglas Costa, este avanza y centro al segundo palo, sobre Mandzukic, un gigante, que va genial de cabeza y que lo tenía que marcar el buenísimo, pero pequeño (qué lastima) de Carvajal. Si no quieres, yo tampoco lo haría, hacer el relevo a Marcelo con Kroos o Modric, no te queda otra que jugar con tres centrales. Como si sube Marcelo, no lo hace Carvajal y al contrario, la defensa de cuatro siempre la tienes montada, y los centrales de los lados serían los encargados de hacer los relevos a esos carrileros. Así hubieras corregido las subidas de Douglas Costa  y estaría también corregido el segundo palo, no obstante, con tres centrales, el de banda contraria se encargaría de Mandzukic, si fuera necesario. ¡… brrrr, y estaba Casemiro en el campo! Para hacer 1-3-4-1-2, y luego, al salir Bale, 2-1 que me gusta más, con ½ puntas con asistencia y llegada.

Desde esta parte del mundo, por el bien de nuestro deporte rey.