El timo que aterra a los padres: la Guardia Civil alerta sobre el falso hijo que llama para robarte
El 'falso hijo' puede solicitar cantidades que oscilan entre los 4.000 y los 10.000 euros

Mensaje de Whatsapp del Falso hijo que pide dinero con urgencia.
Ha vuelto una de las estafas que más daño hace. Y no solo por las cifras que roba, sino por el golpe emocional que deja tras de sí. La Guardia Civil ha detectado en los últimos días un repunte del conocido método del “falso hijo” y ha lanzado un advertencia urgente tras recibir en los últimos días varias denuncias de ciudadanos que han sido víctimas de fraude que juega con el afecto, la urgencia y la buena fe.
Los casos registrados siguen el mismo patrón: las víctimas reciben un mensaje por WhatsApp o SMS de un número desconocido en el que, con tono cercano y algo de urgencia, alguien se hace pasar por su hijo o hija. El estafador asegura que ha cambiado de número porque ha perdido el móvil anterior y necesita ayuda urgente: una transferencia inmediata para salir de un apuro. “Hola, mamá, este es mi nuevo número. Tengo un problema y necesito que me hagas una transferencia. Luego te explico. Es urgente.”
La mayoría de las transferencias se hacen a través de Bizum, precisamente por la rapidez con la que se ejecutan. Las cantidades enviadas oscilan entre los 4.000 y los 10.000 euros, y en muchos casos, una vez hecho el primer pago, los delincuentes vuelven a contactar para pedir una segunda suma, usando otra excusa distinta pero con la misma presión emocional.
La alarma salta cuando las víctimas, tras efectuar la primera transferencia, reciben un segundo mensaje o incluso una llamada de un supuesto gestor bancario, que les solicita una nueva transferencia. Aunque el pretexto cambia, la cantidad solicitada sigue siendo similar y la urgencia en la petición permanece intacta, lo que genera más dudas sobre la posible estafa.
Los agentes especializados en delitos telemáticos de la Guardia Civil investigan esta nueva oleada de la estafa del 'falso hijo' que, en en los últimos días ha golpeado en municipios de la vecina costa granadina. Explican que los estafadores usan líneas diferentes y mensajes automatizados, lanzados de forma masiva, a ver quién pica. Y lo grave es que no hace falta personalizar, solo que la víctima responda movida por la emoción.
Por eso, desde el Instituto Armado insisten en verificar antes de pagar. Si recibes un mensaje de este tipo, llama al número habitual de tu familiar o a números conocidos por los familiares para contrastar el mensaje. Si no contesta, espera. Y si sospechas que estás ante un intento de estafa, contacta de inmediato con el 062.
Este tipo de delitos se mueven en una zona gris donde la tecnología, el miedo y el amor se cruzan. No necesitan grandes habilidades informáticas ni hackeos sofisticados: les basta con conocer cómo reacciona un padre o una madre cuando cree que su hijo está en problemas. Porque no hay estafa más dura que aquella que entra por donde más duele: el corazón.