La invernal noche del pasado sábado, El Zapillo fue el escenario de un susto provocado por el fuego y que obligó a movilizarse a los bomberos de la capital, la Policía Nacional, la Policía Local y un equipo sanitario. Concretamente, fue en la calle Téjar del barrio zapillero donde se vivió el suceso, cerca de las diez de la noche.

El suceso no fue otro que el incendio en el interior de una chimenea en una vivienda. Para luchar contra el fuego, uno de los residentes en el domicilió echó agua en la chimenea, empeorando así las condiciones del incendio y, sobre todo, la humareda desprendida por el fuego.

Hasta el lugar de los hechos se desplazaron tres camiones del Parque de Bomberos de Almería capital, que extinguieron las llamas y certificaron que tan solo se habían generado algunos daños materiales por el humo del incendio en la chimenea.

Por otra parte, los equipos sanitarios tuvieron que atender in situ a un hombre de 40 años y a una mujer de 49 años, sin tener quemaduras del incendio, y no precisaron de traslado hospitalario tras el suceso.

De esta forma, todo quedó, efectivamente, en un susto sin tener que lamentar daños más allá de los desperfectos provocados por el humo: un incendio que podría haber acabado en tragedia y que, sin embargo, no fue a más.