Un almeriense será al fin operado del riñón este jueves tras tres años de espera
Responsables de Torrecárdenas le han pedido disculpas por el injustificable retraso

La intervención quirúrgica será practicada por especialistas del servicio de Urología de Torrecárdenas.
El vecino de un pueblo de Los Filabres de 58 años que lleva desde 2019 esperando para ser operado de una piedra del riñón será intervenido quirúrgicamente de esta dolencia por especialistas del servicio de Urología el próximo día 1 de septiembre en el Hospital Universitario Torrecárdenas.
Tras la denuncia de la asociación El defensor del paciente y la publicación del caso en este periódico, responsables del hospital almeriense llamaron personalmente al enfermo, que fue citado el pasado lunes, 22 de agosto, en el centro, donde le notificaron que la operación se realizaría el 1 de septiembre, es decir el próximo jueves.
El paciente fue atendido en su vista al centro hospitalario de la capital, al que acudió junto a su mujer, por un urólogo y por un alto cargo de su equipo directivo, que además de informarles de la fecha de la intervención quirúrgica les pidieron disculpas en nombre del centro por la enorme e injustificada demora en la atención de su dolencia, y que tanto daño y perjuicios le han causado.
Y es que este hombre sufre desde 2017 fuertes y continuos dolores que le llevan a tomar calmantes cada ocho horas, y en muchos casos, prácticamente todas las semanas, como dice, tiene que acudir a los servicios de urgencias del consultorio de su pueblo o al centro de salud de otro situado a más de 15 kilómetros (en caso de sufrir los dolores pasadas las tres de la tarde), para ser pinchado con calmantes.
“Los mismos médicos que me atendían en el pueblo me decían que me quejara, que denunciara lo que me estaba pasando porque creían que así no podía seguir”, reconocía a este diario días atrás.
Satisfecho
Ahora, con las buenas noticias recibidas, el paciente se muestra satisfecho por la respuesta de Torrecárdenas y por que sus responsables se hayan disculpado por lo sucedido, aunque haya pasado un calvario de tres largos años que para él se han hecho eternos.
Pero en este momento solo espera que la operación transcurra con normalidad para poder recuperar una vida normal, sin el dolor que le ha marcado cada momento en los últimos años, aunque pese a todo ha continuado trabajando en una empresa de construcción.
Sus problemas con las piedras en el riñón -pues ha sufrido dos episodios ya- comenzaron en 2017, aunque no fue hasta septiembre de 2019 cuando, según dice, fue incluido en una lista de espera para ser intervenido e inició los trámites para realizar el preoperatorio del segundo cálculo, como consta en documentos que ha facilitado a este periódico, en el que se especificaba que debía ser sometido a una ureteroscopia para el tratamiento de la litiasis, que figura como diagnosticada en el mismo escrito.
No obstante, la pandemia se cruzó por el camino y desde entonces no volvió a saber nada de la operación, si bien los fuertes dolores no cesaron y se ha tenido que seguir medicando a diario desde entonces.
Reanudación del procedimiento
Tras su última reclamación, la familia consiguió reanudar el procedimiento para la operación y fue citado para el preoperatorio. Fuentes del Hospital Torrecárdenas informaron de que el pasado 29 de marzo de este año fue sometido a un TAC previo al tratamiento quirúrgico, y que el 7 de junio el servicio de anestesia dio el visto bueno a la intervención , con lo que entonces habría entrado de nuevo en la lista de espera.
En virtud del decreto de garantías de tiempos de respuesta para intervenciones quirúrgicas, tendría que ser operado antes del 7 de diciembre de este año. No obstante, tras las reclamaciones de la familia y la denuncia del Defensor del paciente, la intervención ha sido 'adelantada' al próximo 1 de septiembre.
Y es que a raíz de este caso, ‘El defensor del paciente’ dirigió un escrito al presidente de la Junta, a la consejera de Salud y al gerente de Torrecárdenas para reclamar que “ tomen medidas” para poner remedio a este caso y, en general, a todos los problemas provocados por “la falta de inversión en medios y personal” en el sistema público de Salud de Andalucía.