ONGs acogieron el año pasado a 400 refugiados, la mayoría de Venezuela
CEAR advierte sobre “máximos históricos” en las solicitudes y sobre el rechazo al 76 por ciento

Llegada de refugiados a Barajas
La inestabilidad en el África subsahariana, la guerra en Oriente Medio y la crisis en Venezuela generan un flujo inédito de refugiados y asilados en la provincia de Almería. Según datos oficiales del Ministerio del Interior, ofrecidos en el Senado, las entidades no gubernamentales con acuerdos de colaboración gestionaron la acogida de casi 400 refugiados en Almería durante el año 2018.
La cifra supone aproximadamente el 7 por ciento de todas las personas asistidas como refugiadas en la comunidad autónoma de Andalucía (4.700) en ese periodo (200 acabaron en el Centro de Acogida para Refugiados de Sevilla).
Las nacionalidades de los expatriados son una radiografía de los grandes conflictos humanitarios en la actualidad y, en cierto modo, de las conexiones históricas de España con países de su entorno. Venezuela es el primer grupo de refugiados. Acumula prácticamente un tercio de las acogidas registradas durante el año 2018 fruto de la brecha abierta entre los chavistas y la oposición.
Las ONGs de la provincia de Almería reciben a estos refugiados desde hace tres años con cada vez mayor frecuencia y trabajan con planes para la asistencia social, educativa y de inserción laboral de estos ciudadanos latinoamericanos.
“Reasentamiento
"
Por su parte, los refugiados sirios constituyen el segundo grupo más numeroso con el 15 por ciento de las acogidas en Andalucía. Proceden en su inmensa mayoría de los planes de “reasentamiento” firmados por España en el seno de la Unión Europea tras la grave guerra civil y el avance de los yihadistas en Siria e Irak. España debía asumir 17.000 expatriados de esta región.
En Almería existen tres grandes organizaciones sin ánimo de lucro dedicadas a la atención de los refugiados. Son Cruz Roja Española, Fundación Cepaim-Almería Acoge y Accem. Todas ellas consiguieron la exigente acreditación del Gobierno para participar en los programas de asistencia. Necesitan, entre otros requisitos, inmuebles para albergar a los recién llegados y planes de inserción social y laboral.
Según la Comisión Española de Ayuda al Refugiado, “en 2018 España volvió a superar su máximo histórico con 54.065 solicitudes de asilo y se situó como el cuarto país de la Unión Europea, con el 8 por ciento del total, por encima de Italia, Reino Unido o Suecia”. Sin embargo, “el año pasado, volvió a reducirse la concesión de protección internacional en España”, matiza CEAR en su última memoria anual. “Se les denegó la protección al 76 por ciento de los solicitantes”.