El modelo agrícola de los invernaderos solares del Sur de Europa es un referente de sostenibilidad y eficiencia. Pero detrás de cada fruta y hortaliza hay algo más: historias familiares, valores cooperativos y jóvenes que apuestan por el futuro del campo, garantizando alimentos frescos y seguros para millones de consumidores europeos.

Los invernaderos solares del Sur de Europa son un sistema de producción sostenible que da trabajo a más de 15.000 familias y que ha evolucionado gracias a la innovación y la digitalización sin perder la esencia del trabajo en equipo. Este modelo aprovecha la luz del sol y las condiciones climáticas favorables para producir frutas y hortalizas durante todo el año, reduciendo la huella hídrica y fomentando el empleo de técnicas sostenibles y respetuosas con el medio ambiente como el control biológico.

El programa de promoción europeo ‘Es de Invernadero. Frutas y Hortalizas Sostenibles de Europa’, impulsado por HORTIESPAÑA y cofinanciado por la Unión Europea, publica una videoentrevista a varias generaciones de agricultores de una misma familia en la que se puede ver la evolución del sector.

Historias que inspiran

“La familia en mi vida lo ha sido todo. Trabajar en los invernaderos y en la tierra es un trabajo muy duro y hemos estado unidos para salir adelante. No sabes la alegría que tenemos de que continúen con el trabajo que inició su padre. No hay nada más grande que ver a mis hijos desvivirse por la tierra, al igual que hacía él”, afirma Encarna Rodríguez, primera generación de agricultores en la familia en la videoentrevista.

Miguel Gallardo, segunda generación, comparte su experiencia: “Me he criado viendo trabajar a mis padres y abuelos en la finca. Hoy, después de décadas, puedo decir que mantener esta actividad no es un sacrificio, es un privilegio. La agricultura es lo más fascinante que hay y lo que más te llena. Además, hemos pasado de cero a cien en innovación: riego por goteo, control biológico, digitalización… Ahora trabajamos en invernaderos ecológicos y biodinámicos, buscando la autosostenibilidad.”

María Gallardo representa a la nueva generación de agricultores: “Me formé como educadora, pero decidí volver al campo porque siempre he visto la agricultura como algo valioso. Mi objetivo es dignificar este sector y mostrar que es atractivo para los jóvenes y para las mujeres. El invernadero del futuro lo imagino más tecnificado, más sostenible y circular, con inteligencia artificial y control biológico. Trabajar aquí significa satisfacción: detrás de cada fruto hay esfuerzo y sacrificio de familias humildes cuyo deseo es alimentar a Europa de forma segura y sostenible.”

Un futuro con raíces

El relevo generacional no solo asegura la continuidad de los invernaderos solares, sino que lo impulsa hacia la sostenibilidad y la innovación. Con la incorporación de las nuevas generaciones, los invernaderos seguirán siendo un ejemplo de producción responsable y competitiva.

La videoentrevista estará disponible en el canal de Youtube de ‘Es de Invernadero’ y en los perfiles de redes sociales de la campaña en Facebook e Instagram.