¿Cómo luchar contra la sequía en el desierto del sur de Europa? La respuesta a esta pregunta la ofreció este lunes por la mañana en Reikiavik (Islandia) un político almeriense. Se trata de Ramón Fernández-Pacheco, consejero de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural de la Junta de Andalucía, que participó en una cumbre mundial sobre agua y cambio climático.

Fundamentalmente, el consejero resumió la apuesta del departamento que dirige en Sevilla por hacer frente a la sequía con recursos hídricos no convencionales, es decir, con agua procedente de plantas desaladoras y agua regeneradas procedentes de depuradoras que, tras un tratamiento terciario, pueden ser usadas para riegos urbanos y agrícolas.

En este sentido, la provincia de Almería se sitúa, junto con Málaga, como el territorio andaluz donde más se están desarrollando proyectos y actuaciones para garantizar mayores caudales de aguas desaladas y regeneradas.

Por ejemplo, ya se calculan unos futuros aportes de hasta 45 hectómetros cúbicos gracias a la reutilización de aguas residuales ya depuradas y tratadas en la capital almeriense, Roquetas de Mar, El Ejido, Mojácar, Huércal-Overa y Cuevas del Almanzora. En esta última localidad del Levante almeriense, la puesta en marcha de una potabilizadora en el entorno del pantano permite dar agua de calidad a unos 150.000 vecinos de Antas, Arboleas, Carboneras, Cuevas del Almanzora, Garrucha, Huércal-Overa, Los Gallardos, Mojácar, Pulpí, Turre, Vera y Zurgena. La cantidad de agua estimada al año procedente de ese recurso no convencional es de unos 6 hectómetros cúbicos.

Es, en realidad, agua de mayo para una comarca que ya parece acostumbrada a resignarse, por la sequía, a no recibir agua ni del trasvase del Negratín (desde Granada) ni desde el Tajo-Segura (Castilla-La Mancha). De cumplirse la Ley, siempre y cuando se garantice el caudal ecológico en las cuencas cedentes, Almería podría recibir al año hasta 75 hectómetros cúbicos. Pero la realidad es que del Negratín no se envía agua al Levante almeriense desde hace cuatro años y del Tajo-Segura los aportes son más que mínimos. “Y no solo eso, el último recorte a este trasvase tendrá consecuencias para más de 20.000 regantes”, se queja tanto el citado consejero como las comunidades de usuarios de la zona.

Ante esa previsible falta de aportes desde los trasvases, todo apunta a que Almería, en pocos años, podría producir más agua regenerada que la que le corresponde por los trasvases aprobados en su día.

Desde la Consejería de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural de la Junta se afanan en ejecutar obras en depuradoras para reutilizar esos recursos hídricos.

En los últimos seis años se han ejecutado obras en Tahal, Alcudia de Monteagud, Abla, Antas, Huércal-Overa, Níjar y Cuevas del Almanzora por un importe cercano a los 34 millones de euros.

Junto a ello hay que destacar las obras en proyecto o en ejecución en otros núcleos de población más grandes como pueden ser la propia capital, Roquetas de Mar y El Ejido.

Hace poco más de un mes, la Consejería de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural de la Junta de Andalucía autorizaba la producción y suministro de aguas regeneradas procedentes de la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de Roquetas de Mar para un volumen anual de 10.950.000 metros cúbicos (10,9 hectómetros) destinado a un uso fundamentalmente agrario, pero también urbano y recreativo.