La luna, ese farol nocturno que tantas historias y leyendas ha inspirado, volverá a vestirse de misterio este domingo 7 de septiembre. Al caer el sol y asomar tímida por el horizonte, nuestro satélite se teñirá de tonos rojos y cobrizos en un eclipse total visible durante unos minutos, un espectáculo gratuito, seguro y efímero que invita a alzar la vista y dejarse deslumbrar por la precisión del cosmos.

"Es un fenómeno muy bonito y, al contrario que los eclipses solares, no es nada peligroso. No hay riesgo alguno, cualquiera lo puede mirar sin protección y es un espectáculo maravilloso y gratuito", explica el astrónomo del Observatorio almeriense de Calar Alto, Gilles Bergond.

La clave: un horizonte despejado

En Almería, la observación tendrá la particularidad de coincidir con la salida de la luna, por lo que las condiciones del lugar elegido serán decisivas. "Lo más importante es tener un horizonte orientado al este perfectamente despejado. Por ejemplo, una playa con vistas al este por Cabo de Gata", recomienda Bergond. A esto, Ana Guijarro, compañera astrónoma del mismo observatorio, plantea como un buen lugar la playa de Mojácar.

La totalidad del eclipse durará alrededor de quince minutos, hasta las 20:53 horas, cuando la luna volverá ganar brillo paulatinamente, perdiendo su característico color rojizo. Desde Calar Alto recuerdan a los almerienses que NO hace falta subir al propio observatorio para ver el fenómeno: "Cualquier sitio de playa, una colina o, incluso, una azotea con orientación este-sureste podría valer si el horizonte está despejado", señalan.

La 'luna de sangre'

El rojo que adquiere la luna durante un eclipse total tiene una explicación científica que no le resta belleza. La luz del sol, al atravesar la atmósfera terrestre, se desvía y enrojece, proyectando esos tonos característicos sobre la superficie lunar. 

"Algunos lo llaman luna de sangre por este color típicamente rojo, aunque puede variar desde un tono cobre hasta casi negro", señala Bergond, quien, además, subraya que todo dependerá de la presencia de polvo, nubes u otras condiciones atmosféricas que la acompañen.

Un fenómeno único y una buena antesala

El eclipse lunar se produce cuando el Sol, la Tierra y la Luna se alinean casi a la perfección, quedando el satélite oculto en el cono de sombra de nuestro planeta. Aunque Almería no esté en la mejor posición para disfrutar de toda la fase, la cita merece la pena por lo especial de la escena: una luna llena que nace ya eclipsada sobre el Mediterráneo. 

Y es que cuando el eclipse suceda, la luna llena estará apenas a unos dos grados por encima del horizonte: "Por esto insisto en que se busque un lugar despejado. Si está muy oscuro, será difícil ver la luna eclipsada a simple vista. Recomendamos usar prismáticos (de buen diámetro y poco aumento, como un 8x40 o 10x50)", detalla.

El astrónomo concluye mirando al futuro: "Creo que será un buen preparativo también para los siguientes eclipses que están por venir, que serán eclipses de sol y seguramente lo hablaremos en su momento". Así, la noche del domingo invita a buscar un rincón despejado, levantar la vista al este y dejarse sorprender por un instante en el que el cielo se vuelve espectáculo, ciencia y poesía, todo a la vez.