Un vídeo publicado en exclusiva por Telecinco sigue alimentando la polémica en torno a Ana Julia Quezada, condenada a prisión permanente revisable por el asesinato de Gabriel Cruz en 2018. La asesina del niño, en su reciente declaración ante el juez, reconoce que ha mantenido relaciones sexuales con uno de los funcionaros de la prisión de Brieva (Ávila) y que fue el cocinero, con el que también habría tenido relaciones, quien le facilitó un teléfono móvil por medio de su novia, que sería la que se lo hizo llegar.

Declaración ante el juez

En su comparecencia judicial, Quezada admitió haber mantenido relaciones sexuales con un funcionario de la prisión, señalando que en ocasiones eran consentidas "a veces" y sucedía "sobre todo cuando él tenía guardia", momentos en los que se veían "en la garita" pero también ocurría en la propia celda de la interna cuando entraba en turno de tarde. 

"No le podía decir que no, es un funcionario", admite. Además, este funcionario al parecer le habría dado a cambio  regalos como "perfume, chocolate, cremas" o "cositas". Sin embargo, negó haber chantajeado al funcionario con grabaciones de los encuentros.

La investigación sigue en curso

Está abierta una investigación judicial por presunto cohecho. Se investiga si varios empleados de la prisión proporcionaron trato de favor a Quezada a cambio de sexo, confirmando las autoridades que los implicados ya no trabajan en la cárcel de Brieva.

Ana Julia citó en su declaración a la madre de Gabriel cuando le preguntaron cuándo acabaron dichas relaciones: "Yo estaba en aislamiento porque la madre del niño había salido en la tele respecto a esto que habían alguna que estaban pasando ciertas cosas en el centro penitenciario y la subdirectora de seguridad me articuló por temor a las internas".