La Voz de Almeria

Turismo Rural

El primer pueblo ecológico de Europa está en Almería: su mayor tesoro es un sendero con cascada

Uno de los rincones más auténticos de la Sierra Nevada almeriense

Este sendero almeriense esconde una cascada en su recorrido.

Este sendero almeriense esconde una cascada en su recorrido.La Voz

Tito Sánchez Núñez
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Enclavado en el corazón de la Alpujarra Almeriense, un pequeño municipio presume de ser el primer pueblo ecológico de Europa, título que reconoce su compromiso con la sostenibilidad y el respeto al medio ambiente y que recibió en 1999. 

Con apenas 547 habitantes en 2024, Ohanes mantiene viva su esencia tradicional: calles estrechas y empedradas, casas encaladas cubiertas de flores, fuentes, plazas y un entorno natural que invita a perderse.

Entre sus mayores tesoros se encuentra el sendero del Río Chico, una ruta que resume la belleza y la historia de esta tierra. Se trata de un recorrido circular de unos 10 kilómetros de longitud, con una dificultad media-baja y una duración aproximada de cuatro horas. 

El sendero arranca siguiendo un antiguo camino tradicional, bordeado por muros de lajas de pizarra, castaños y una exuberante vegetación de ribera que acompaña el curso del río.

A medida que se avanza, el camino se vuelve sinuoso, dejando atrás balates y cortijos abandonados, testigos mudos de la vida agrícola que una vez floreció en estos bancales. No tardan en aparecer las eras tradicionales, donde antaño se trillaba el grano, acercando al caminante a la arquitectura típica de la Alpujarra.

Uno de los puntos más destacados de la ruta es el conjunto etnográfico del Molino de la Herrería, una joya patrimonial que habla de los antiguos oficios ligados al agua. 

Más adelante, como un espectáculo natural, surge el salto de agua de la acequia de careo, una cascada que sorprende por su belleza en plena montaña. Frente a ella, se levanta la antigua fábrica de luz, otro vestigio de cómo el agua fue fuente de vida y progreso.

En el tramo final, el sendero desciende suavemente hasta alcanzar la zona recreativa del Río Chico, un espacio ideal para descansar antes de emprender el regreso al pueblo. Todo el recorrido transcurre entre sendas y pistas de tierra.

Caminar por el sendero del Río Chico no es solo una actividad al aire libre, sino una inmersión en la historia, la cultura y la naturaleza de uno de los rincones más auténticos de Sierra Nevada.

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