El concepto del árbol de la vida ha estado presente en un sinfín de culturas a lo largo de todo el globo y en diferentes momentos de la historia de la humanidad. En muchas creencias religiosas, como ocurre en el taoísmo o el catolicismo, este árbol es capaz de concederle la vida eterna a todo aquel que ose probar sus frutos.

Sin embargo, para el secretario  de la asociación Proyecto ‘Arbol de la Vida’, Alberto Bretones, y su presidenta, Paqui Alpañez, este término alberga un significado aún mayor que el de la propia inmortalidad. “Para mí, es calma, espiritualidad y evolución; los mismos adjetivos con los que nosotros definiríamos la asociación”, afirma Alberto.

La evolución “hacia una mirada menos material” que menciona Alberto podría considerarse como la verdadera semilla de este proyecto, que ha establecido su sede en el pueblo de Almócita. “Hay un momento en el que te das cuenta de que estás viviendo para trabajar y que te estás olvidando incluso de ti mismo, de lo que verdaderamente te gusta”, confiesa Paqui.

Cambio
Así, con el objetivo de  lograr “una mayor calidad de vida” que aúne, como señala la presidenta, “el bienestar físico e interior, la solidaridad y el respeto al medioambiente”, esta asociación pretende traer a la provincia actividades de la más diversa índole y, en su  mayor parte, gratuitas y destinadas a todo tipo de públicos. “Talleres de cocina, clases de inglés, cursos para crear tus propias construcciones ecológicas...”, apunta Alberto.

Actividades
A lo largo de este verano, los interesados en  las iniciativas elaboradas por la asociación podrán acudir a las clases de yoga que se imparten los sábados por la mañana en la piscina municipal de Almócita. El coste pos asistir a dos de estas sesiones es de 25 euros, aunque “también se puede acudir  a una sola clase por un precio menor”, informa Paqui. Además, ambos ofrecen sesiones particulares de reiki con donativo voluntario. Asimismo, entre los meses de septiembre y octubre, arrancarán dos nuevas actividades que se efectuarán una vez al mes: rutas de senderismo y de bicicleta de montaña. “Queremos que estas sean accesibles para todos, desde mayores a personas con problemas de movilidad”, afirma Alberto.

Por otro lado, entre las actividades que la asociación Proyecto 'Árbol de la Vida' quiere poner en marcha próximamente destacan las jornadas de esparcimiento. "Serán pequeños seminarios de descanso que se celebrarán los fines de semana en la naturaleza y en los que habrá clases de yoga, meditación, senderismo, charlas informativas e incluso proyecciones de películas", asegura Paqui. Uno de los primeros destinos será el camping de Almócita, el pueblo que les ha abierto los brazos para emprender esta aventura.