“Este, por supuesto, es el lugar donde nos hace más ilusión presentar este documental”, asegura Carles Prats. “Tenemos muchas ganas. Lo presentaremos en Granada, y en noviembre lo estrenamos en el festival In Edit, de Barcelona, el más importante del género de documental musical, y fue un exitazo; lo hemos llevado a Chile... Pero en Almería, en esta tierra de la que Strummer se enamoró, era a donde queríamos llegar, regresar más bien”.

Con una dilatada carrera como documentalista, Prats ha dirigido ‘Quiero tener una ferretería en Andalucía’, un filme de unos 70 minutos sobre una de las facetas más desconocidas de la biografía de Joe Strummer, líder del grupo The Clash y verdadero mito de la música rock y punk en muchos países: sus años de vida en Almería, la tierra a la que llegó para filmar varias películas y en la que decidió radicarse.

“En Barcelona incluso había producciones tremendas, de Scorsese... Y de pronto llega este trabajo, hecho sin dinero, simplemente con las ganas de contar una historia muy bonita, y fue como un reguero de pólvora”, continúa Prats. “En Chile funcionó muy bien, en el Dock of the Bay, en San Sebastián, se agotaron las entradas, y tuvo unas críticas fenomenales... Pero teníamos muchas ganas de presentarlo en Almería”.

Desierto y rock

‘Quiero tener una ferretería...’ será presentado, pues, por fin, el próximo sábado, 21 de enero, en el Museo Arqueológico de Almería, a partir de las 20 horas. Y en la mañana de ayer, el delegado de Cultura, Antonio José Lucas, lo presentó a la prensa acompañado por Prats y los dos miembros de la asociación Los Isleta, Antonio Jesús García ‘Che’ y Javier Navarrete, verdaderas almas e impulsores de un proyecto “que nos ha llevado dos meses de trabajo, pero que es el resultado de varios años de ideas e ilusiones”, explicó Che.

“El germen más o menos serio de esta cruzada particular nuestra, lo podemos situar allá por el año 2008”, continuó. “Cuando comenzamos, a través del Instituto de Estudios Almerienses, a hacer una serie de acciones para reivindicar el paisaje almeriense dentro de un concepto hasta ahora inédito, que es la vinculación de algo tan particular como es el desierto, con algo que en principio le es tan ajeno, como la cultura del rock”.

Una ‘estrella’ muy humana

Rodada durante el pasado verano en locaciones de Tabernas, San José y Granada, la cinta se basa en los testimonios de unas veinte personas que tuvieron que ver con la vida de Strummer en Almería. Desde su viuda, Lucinda, hasta Jo, el del famoso bar de Los Escullos, pasando por Jem Finner, de The Pogues, o Pepe, el del camping Red Fish, trazan con sus recuerdos una imagen tan humana del mítico rockero que en Chile, por ejemplo, “los críticos han dicho que era algo increíble, dada la imagen de duro y punk que tenían de Strummer”, recordó Navarrete, entre risas.

A través de las muchas anécdotas del documental, pues, más que a la estrella de las fotos profesionales de The Clash vemos a un tipo que se refugió en San José y sus alrededores para llevar la vida que él quiso. “A un inglés que disfrutaba ir a la peña flamenca de Fernán Pérez a escuchar a un chaval que se llamaba El Niño de los Olivares”, afirma Che. “O que decía que para circular por Almería había que llevar un casete de Manolo Escobar, para, si te paraba la Guardia Civil, hacer buenas relaciones...”.

“Además, desvelaremos una cosa”, agregó Carles Prats. “Y es que tenemos la idea, por ahora muy incipiente, de que este proyecto sea el comienzo de una trilogía. No sabemos aún cuáles serán las otras dos partes, pero queremos hacer como Leone con su ‘trilogía del dólar’: no hemos tenido casi medios para la primera parte, ahora para la segunda queremos un poco más de producción, y ya con la tercera, hacernos millonarios”, bromeó. “Pero, ya en serio, queremos seguir recuperando las cosas que han pasado aquí, en Almería”.